El fabricante estadounidense Boeing ha anunciado que inicia la producción de los primeros simuladores T-7A Red Hawk, que son parte del sistema de entrenamiento avanzado de la Fuerza Aérea de EEUU. Boeing espera poder entregarlos en 2023.
Los equipos de Boeing están ensamblando los primeros dos entrenadores de sistemas de armas y un entrenador de vuelo operativo en su fábrica de St. Louis. Estos simuladores, que son la base para el entrenamiento de pilotos y clave para la preparación de la Fuerza Aérea, pueden conectarse digitalmente a aviones T-7A reales y permitir escenarios de entrenamiento integrados y constructivos virtuales en vivo.
“El sistema de entrenamiento del Red Hawk es posiblemente el más avanzado del mundo”, dijo Chuck Dabundo, vicepresidente de Programas Boeing T-7. “Este sistema está 100% integrado con la experiencia del piloto en el mundo real, ofreciendo una simulación completa”, con asientos de movimiento dinámico y proyectores en 8K, la resolución más alta jamás vista en un simulador.
“Esta es la experiencia más precisa e inmersiva que cualquier piloto puede tener fuera de la aeronave”, dijo Sherri Koehnemann, directora de formación y mantenimiento del T-7A en Boeing Global Services. “Hemos integrado la formación en todos los ámbitos, incluidas las actualizaciones de software de ‘una sola pulsación’. Lo que un piloto ve en el aula, en sus dispositivos de entrenamiento de escritorio y en los entrenadores de sistemas operativos y de armas será lo que vean en el avión. Los futuros pilotos pueden esperar una formación más holística e inmersiva”, comenta la directora.