La aerolínea canadiense anunció que despedirá a unos 20.000 de sus 38.000 empleados, debido a la caída de la demanda de viajes aéreos provocada por la pandemia Covid-19. Además, planteará a los auxiliares de vuelo reducir sus turnos, excedencias de hasta dos años e incentivos en viajes en caso de bajas voluntarias.
El plan comprende el despido de un mínimo de 19.000 trabajadores y de hasta 22.800 a partir del 7 de junio, según informaron diversas agencias. «Hoy hemos tomado una decisión muy difícil y vamos a reducir significativamente nuestras operaciones para ajustarnos a las previsiones, lo que lamentablemente implica reducir entre un 50% y un 60% nuestra plantilla», informó la empresa en un comunicado.
Actualmente el principal operador de Canadá mantiene en tierra 225 aeronaves y ha reduciendo su operación en un 95%.
El plan de reducción de costes aplicado en marzo ya supuso el despido de casi la mitad de la plantilla, y sólo 16.500 trabajadores fueron readmitidos.
Además, la empresa planteará a los auxiliares de vuelo reducir sus turnos, excedencias de hasta dos años e incentivos en viajes en caso de bajas voluntarias, según un boletín interno remitido el jueves a los representantes sindicales de los trabajadores.