La Agencia Espacial Europea (ESA) ha adjudicado a Thales Alenia Space un contrato de estudio de un millón de euros para desarrollar una carga útil que extraiga oxígeno de la superficie rocosa de la Luna.
Para poder permanecer en la Luna de forma sostenible, los astronautas necesitarán explotar los recursos que encuentren sobre el terreno, en vez de transportar esos recursos desde la Tierra. Uno de esos recursos es el oxígeno.
Los equipos de Thales Alenia Space en el Reino Unido, conjuntamente con AVS, Metalysis, Open University y Redwire Space Europe, han estado trabajando en las especificaciones de una carga útil de demostración en el marco de una misión lunar de la ESA. El demostrador utiliza el proceso de electrólisis de sal fundida para extraer oxígeno de la roca lunar, conocida como “regolito”.
Este concepto de carga útil, seleccionado entre las propuestas de varios consorcios industriales, pretende probar la validez de la utilización de los recursos in situ (ISRU por su sigla en inglés), concretamente la producción eficiente de oxígeno, en las cantidades que se requieren para las futuras colonias lunares.
Andrew Stanniland, CEO de Thales Alenia Space en el Reino Unido, declaró: “Este contrato es verdaderamente apasionante. La adaptación de procesos y herramientas al entorno espacial, muchos de los cuales nos parecen evidentes en la Tierra, será capital para nuestro futuro en muchos ámbitos. Me siento orgulloso de que nuestros equipos hayan sido elegidos para coordinar este estudio junto con nuestros valiosos socios AVS, Metalysis, Open University y Redwire Space Europe, para encontrar una solución al complejo desafío de generar oxígeno para sostener la vida humana en la superficie lunar.”
David Binns, ingeniero de sistemas del Centro de Diseño Simultáneo de la ESA, añadió: “Para la ESA es un placer colaborar con Thales Alenia Space en el Reino Unido y con sus socios para desarrollar un demostrador de extracción de oxígeno como parte de la iniciativa de aprovechamiento de los recursos espaciales. Eso ayudará a encontrar soluciones a los desafíos que plantea la exploración sostenible de la Luna”.