Madrid.– El presidente de International Airlines Group (IAG) y de Iberia, Antonio Vázquez, ha publicado una carta a los clientes de la compañía en la que afirma que existe «serio riesgo de desaparecer» si la empresa no acomete su plan de viabilidad, que prevé el recorte de 4.500 empleos.
Asegura que quiere negociar dicho plan con los sindicatos, que han convocado paros en vísperas de Navidades. «Nuestro único límite es resolver los problemas estructurales que arrastramos desde hace tiempo porque de no hacerlo correríamos serio riesgo de desaparecer y es algo a lo que no estamos dispuestos», afirma el presidente.
Tras calificar la huelga anunciada de “irresponsable”, “innecesaria” y un “abuso”, insiste en que “Iberia necesita un Plan de Transformación que le permita ser viable y situarla en el lugar de liderazgo que le corresponde en la industria aérea”.
“Iberia registra un volumen de pérdidas insostenible -un millón de euros cada día en los nueve primeros meses de este año y casi 900 millones de euros en los últimos cuatro años-. Su futuro peligra si no se llevan a cabo profundos cambios estructurales. El plan de Iberia busca salvar 15.500 puestos de trabajo. Si no se pusiera en marcha, peligraría la viabilidad de la compañía y estos puestos de trabajo directos se perderían”.
“El Plan de Transformación de Iberia permitirá que nuestro país pueda contar con una compañía española rentable, fuerte, capaz de competir y ocupar un puesto relevante en la aviación comercial en el mundo. El plan de Iberia requiere sacrificios: menos empleos, menos salarios y más productividad, que la compañía está dispuesta a negociar, pero es un plan que le permitirá sanearse y crecer para volver a ser líder en sus mercados. Si no hiciéramos nada, Iberia podría desaparecer y ello supondría un duro golpe para las comunicaciones, el empleo, los negocios, el sector turístico y la imagen de España fuera de nuestras fronteras”, añade el presidente de la compañía.
“Al igual que las demás aerolíneas tradicionales europeas, la compañía padece problemas estructurales, que se agravan en el caso de Iberia por la grave crisis que atraviesa España, y que también está castigando a otras muchas empresas del país en diversos sectores. Iberia es una empresa española, que pertenece a un gran grupo aéreo, como International Airlines Group, con sede social en España, con accionistas de todo el mundo y que le ofrece, entre otras cosas, más garantías de futuro y más recursos para solucionar sus problemas”.
“El próximo 14 de diciembre, Iberia cumple 85 años y estamos convencidos de que cumplirá otros 85, pero para eso tiene que cambiar profundamente. Los accionistas de la compañía han mostrado su compromiso. Los clientes siguen mostrando su fidelidad, pese a las huelgas. Ahora corresponde a todos los trabajadores y a sus representantes un ejercicio de responsabilidad en favor de una Iberia viable, con futuro y que vuelva a ocupar el lugar que merece en la industria aérea mundial”, concluye Vázquez.