Boulder.– Científicos de la Universidad norteamericana de Colorado, bajo la dirección del ingeniero aeroespacial Ryan Starkey, están probando un motor L-FX00 para un vehículo aéreo no tripulado (UAV), el Gojett, que será el primer drone creado en el siglo XXI que supere la velocidad del sonido y el más pequeño de la historia.
El Gojett, que semeja un misil con alas, no es el primer avión de reconocimiento supersónico de la historia, pero sí el que podría revolucionar el sector. Será la aeronave más rápida y eficiente de su clase en cuanto a consumo de combustible y se espera que esta eficiencia sea doblada nuevamente antes de que el GoJett realice su primer vuelo.
Entre otras ventajas, además del consumo económico del combustible, cuenta con una autonomía operativa prolongada en comparación con los UAV convencionales. No necesitará lubricantes. Además, dará la posibilidad de realizar un empuje vectorial y aumentar la velocidad programada, con la opción de equipar el motor con un postquemador, componente que se añade a motores de reacción para proporcionar un incremento temporal en el empuje, inyectando combustible adicional en la tobera de escape de la turbina.
Según el equipo de ingenieros estadounidenses dirigido por Ryan Starkey, su ingenio podrá ser usado tanto para seguir la formación de ciclones y tormentas, como para cumplir con las tareas de inteligencia aérea. El precio estimado de cada drone es de entre 50.000 y 100.000 dólares. Es unas 60 veces más barato que el famoso RQ-170 espía de la CIA, considerado como el más avanzado de los actuales aviones no tripulados de reconocimiento electrónico y derribado por el Ejército de Irán el pasado mes de diciembre. Los RQ-170 no son supersónicos y tienen una envergadura de alas de unos 20 metros.
El primer vuelo experimental del prototipo está programado para finales de este año.