La empresa aeroespacial norteamericana SpaceX lanzó la pasada madrugada al espacio desde Starbase, Texas, la undécima prueba de vuelo de Starship de segunda generación a bordo del cohete Super Heavy de primera generación. Este fue el último lanzamiento desde la configuración actual de la Plataforma 1. Se cumplieron todos los objetivos principales de la prueba de vuelo, lo que proporcionó datos valiosos mientras se prepara la próxima generación de Starship y Super Heavy.
La prueba de vuelo comenzó con el Super Heavy encendiendo los 33 motores Raptor y ascendiendo sobre el Golfo. El exitoso ascenso de la primera etapa fue seguido por una maniobra de puesta en marcha en caliente, en la que la etapa superior de la Starship encendió sus seis motores Raptor para continuar su vuelo espacial.
Tras la separación de etapas, el cohete Super Heavy completó su combustión de retorno para ponerlo en rumbo hacia una zona de amerizaje previamente planificada frente a la costa de Texas, utilizando 12 de los 13 motores previstos. Bajo el mismo ángulo de ataque probado en el vuelo anterior, el cohete descendió hasta encender con éxito los 13 motores previstos (incluido uno que no se reactivó durante la combustión de retorno) para la fase de alto empuje del aterrizaje. El cohete ejecutó con éxito una combustión de aterrizaje única, prevista para su uso en el cohete de nueva generación. El Super Heavy se mantuvo en vuelo estacionario sobre el agua antes de apagar sus motores y amerizar.
Tras completar un ascenso de duración completa, Starship alcanzó la velocidad y trayectoria previstas. Durante el vuelo, Starship desplegó con éxito ocho simuladores Starlink y realizó el tercer reencendido en el espacio de un motor Raptor, demostrando una capacidad crucial para futuros arranques de desorbitación.
La nave espacial reingresó a la atmósfera terrestre y recopiló datos exhaustivos sobre el rendimiento de su escudo térmico, sometido a un esfuerzo intencionado para poner a prueba sus capacidades. En los últimos minutos de vuelo, la nave espacial realizó una maniobra de inclinación dinámica para imitar la trayectoria que seguirán las futuras misiones que regresen a la Base Estelar. A continuación, se dirigió utilizando sus cuatro flaps hasta la zona de amerizaje prevista en el Océano Índico, ejecutando con éxito un giro de aterrizaje, una quema de aterrizaje y un amerizaje suave.
La atención se centra ahora en la próxima generación de Starship y Super Heavy, con varios vehículos actualmente en construcción y preparándose para pruebas. Esta nueva iteración se utilizará para los primeros vuelos orbitales de Starship, misiones operativas de carga útil, transferencia de propelente y más, a medida que avanzamos hacia un vehículo completamente reutilizable y rápido, con servicio en la órbita terrestre, la Luna, Marte y más allá.