Moscú.- Los seis tripulantes la Estación Espacial Internacional (ISS) se refugiaron ayer en las dos naves rusas Soyuz acopladas a la plataforma ante el posible choque con fragmentos de basura espacial.
El seguimiento por radar de los desechos espaciales había pronosticado que estos fragmentos podrían pasar a 820 metros de la ISS, aunque finalmente lo hicieron a solo 250 metros, pero no se registró ningún impacto.
La tripulación pudo regresar a la estación para reanudar las operaciones normales en el interior de la ISS.
«La basura espacial fue detectada muy tarde y no dio tiempo para que la estación hiciera una maniobra para eludirla», explicó una fuente del sector aeroespacial ruso.
Los tripulantes de la ISS recibieron la orden de refugiarse en las cápsulas de rescate de las Soyuz, que se encuentran amarradas a la plataforma orbital, para poder dejar la estación si hubiera sido necesario.
La basura espacial se ha convertido en un problema en los últimos años. Se estima que hay unos 300.000 objetos sobrevolando nuestro planeta y que el número aumenta a un ritmo de un 5% cada año.