Madrid.- El espacio aéreo de Madrid, Baleares y Canarias se ha cerrado debido a «bajas masivas y concertadas de controladores», según informó Aena, en protesta por la nueva normativa sobre su jornada laboral aprobada hoy por el Consejo de Ministros.
Fuentes de Aena señalaron que los controladores estaban pidiendo «bajas masivas y concertadas» en todo tipo de centros de control y torres, lo que ha obligado al cierre del espacio aéreo de Madrid, de Baleares y de Canarias.
Según Eurocontrol, el cierre estaba previsto que se prolongara hasta as 24 horas del viernes. Los aeropuertos de Barcelona y Sevilla están operativos, aunque con una actividad reducida. Los tres aeropuertos gallegos se encuentran sin operaciones de aterrizaje y despegue debido a estos cierres. El aeropuerto de Barajas se encuentra en situación «rate cero», es decir cerrado a las operaciones de aterrizaje y despegue, tras haber abandonado los controladores sus puestos de trabajo.
El gestor aeroportuario señaló que el motivo del cierre es el abandono masivo y concertado de los controladores de sus puestos de trabajo alegando problemas físicos para mantenerse en sus puestos de trabajo. Aena recomienda a todos los pasajeros que no acudan a estos aeropuertos, ya que el tráfico aéreo está interrumpido.
Mientras tanto, Camilo Cela, presidente del sindicato mayoritario de controladores, Usca, anunciaba en rueda de prensa que sus compañeeros acatarán el Real Decreto-Ley aprobado este viernes en Consejo de Ministros que y ha pedido «calma y serenidad» al colectivo.
El Ministerio de Fomento denunció en un comunicado que, hacia las 17.00 horas, los controladores, alegando enfermedad, han abandonado sus puestos de trabajo «en todas las dependencias»; aunque con especial incidencia en Madrid y Baleares. Ante esta situación, el ministro de Fomento, José Blanco, ha convocado un gabinete de crisis del que forman parte el secretario de Estado de Transportes, Isaías Táboas, el presidente de Aena, Juan Ignacio Lema, y el director general de Aviación Civil, Manuel Ameijeiras, para «valorar la situación y aplicar las medidas oportunas dentro de la legalidad».
Por el momento, Aena recomienda en un comunicado a todos los pasajeros que no acudan a los aeropuertos si tenían previsto viajar pero aún no han ido, así como que soliciten información a sus compañías aéreas. Aena solicita a los controladores que “abandonen el chantaje al que someten a la sociedad española tomando a los ciudadanos como rehenes», advirtiendo de que paralizar el tráfico aéreo de un país puede ser sancionado con el despido disciplinario y constituye un delito. La entidad pública califica la paralización del tráfico aéreo como un hecho de «extrema gravedad» y recalca que «esta irresponsable decisión está provocando graves perturbaciones en el tráfico aéreo de toda España».