Washington.- El primer vuelo orbital no tripulado de la nave espacial CST-100 Starliner desarrollada por Boeing, está previsto para finales del próximo mes de marzo, seguido de un análisis de simulación de emergencia con anulación del teclado. La primera prueba de vuelo tripulado sería para el mes de agosto de este mismo año.
La nave espacial de próxima generación CST-100 Starliner de Boeing ha sido desarrollada en colaboración con la Nasa para transportarr tripulantes hacia y desde órbitas terrestres bajas (LEO). Está diseñada para llevar a cabo operaciones de investigación científica de tiempo crítico como parte del programa de tripulación comercial de la Nasa, cuyo objetivo es cooperar con las compañías aeroespaciales para acelerar los esfuerzos relacionados con el espacio.
El astronauta de Boeing Chris Ferguson, y los astronautas de la Nasa Eric Boe y Nicole Aunapu Mann formarán la tripulación de la prueba de vuelo tripulada de CST-100 Starliner.
La nave espacial de Boeing se parece a los módulos de comando y servicio del programa Apollo, pero puede acomodar hasta siete tripulantes. La cápsula sin soldadura puede acomodar cualquier combinación de carga y tripulación. Integra estructuras impresas en 3D OXFAB suministradas por Oxford Performance Materials.
La cápsula CST-100 Starliner es un sistema completamente autónomo, que podrá realizar un acoplamiento automático en la Estación Espacial Internacional (ISS). Alimentada por energía solar, la cápsula contará con controles manuales de respaldo. La nave espacial contará con internet inalámbrico y tecnologías de tableta para la interfaz de la tripulación.
Boeing ha diseñado un traje espacial para el equipo de Starliner durante la misión. El traje espacial presenta un casco ligero y suave, conjunto de tapa de comunicaciones y cremalleras de bloqueo en lugar de cierres.
El traje espacial tiene articulaciones de movilidad en los hombros y los codos, controles de doble suite para la regulación de la presión, cremallera en la cintura para mayor comodidad, bolsillos transpirables para las piernas para el almacenamiento y calzado ligero desarrollado por David Clark y Reebok.
El traje espacial también integra guantes de cuero livianos para tableta y pantalla táctil y una válvula de buzo con flujo de aire. Sus capas permeables permiten que solo el vapor de agua pase a través de la tela del traje.