Jerusalén.- El gobierno israelí ha aprobado el desarrollo y construcción por 220 millones de dólares del satélite de comunicaciones Amos 8 dos años después de que el satélite anterior, Amos 6, explotó en la plataforma de lanzamiento en Florida.
El nuevo satélite será construido por Israel Aerospace Industries (IAI) para cuidar el conocimiento que se adquirió en los últimos años tras la recomendación del Ministerio de Ciencia y Tecnología.
La industria espacial israelí sufrió una seria crisis después de la explosión del Amos 6 en septiembre de 2016 y de la pérdida de contacto con Amos 5 en noviembre de 2015. Altos cargos de la IAI explicaron durante los últimos dos años que era necesaria la adquisición de un nuevo satélite para no cerrar su actividad en materia de comunicación.
El Amos 6 registró un fallo técnico cuando iba a ser lanzado y explotó causando una crisis en la industria de los satélites de comunicaciones de Israel. El cohete que explotó entonce había sido fabricado por la empresa norteamericana SpaceX, de Elon Musk.