Seúl.- La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), durante la conferencia sobre seguridad operacional y aérea celebrada en Seúl, capital de la República de Corea del Sur, ha instado a las partes interesadas en la seguridad aérea a que refuercen su compromiso en un marco basado en estándares globales, cooperación y uso eficaz de datos.
"La seguridad es la máxima prioridad de los socios de la aviación y la aviación es el medio más seguro de viajar largas distancias. El año pasado hubo más de 40 millones de vuelos seguros, un logro que nos enorgullece y que fue posible gracias al respeto por los estándares globales, la cooperación y el valor de los datos", dijo Alexandre de Juniac, consejero delegado de la IATA.
En su intervención, De Juniac destacó el papel clave de la cooperación en el área de la investigación de accidentes aéreos, para la definición de estándares globales. "Existen estándares globales, pero no se cumplen universalmente. La investigación es una de nuestras herramientas de aprendizaje más importantes a la hora de definir estándares globales. Sin embargo, un estudio reciente mostró que, de los casi 1.000 accidentes ocurridos durante la última década, solo unos 300 informes han visto la luz. Y de estos, muchos podrían haber sido mejores”.
“Para aprender de un accidente, necesitamos informes completos, accesibles y puntuales. Los Estados deben, además, respetar plenamente los estándares y procesos establecidos por todas las partes interesadas en acuerdos globales en el contexto de la investigación", declaró De Juniac.
También urgió un diálogo más intenso entre reguladores e industria para crear un marco regulatorio y normativo que cuente con la valiosa experiencia del sector aéreo. “Compartimos el mismo interés en la seguridad aérea y operacional. Sin embargo, el mes pasado Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron medidas para restringir el transporte en cabina de aparatos electrónicos grandes en vuelos procedentes de Oriente Medio y norte de áfrica, una decisión tomada sin previa consulta a la industria de aerolíneas y que pone en riesgo la confianza del público ante las incoherencias que suscita, en tanto que el asunto sobre el transporte de baterías de litio en la bodega de las aeronaves sigue sin aclararse”.
“Estas situaciones deben hacer reflexionar a los gobiernos sobre la necesidad de compartir información con la industria y apoyar a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en el desarrollo de un plan de seguridad aérea global”. En relación a la gestión de datos para la mejora de la seguridad, De Juniac apeló a la rapidez y a la innovación. “Los datos generados de los 100.000 vuelos diarios nos pueden ayudar a desvelar dónde puede presentarse la siguiente amenaza. Necesitamos avanzar en esta área”.
“La iniciativa de Gestión de Datos Globales de Aviación (GADM) es de vital importancia. Incluye más de 470 organizaciones. La información proporcionada por el Intercambio de Datos de Vuelo (Flight Data eXchange – FDX) de la IATA, una base de datos del GADM, contribuye a identificar amenazas potenciales a través del análisis de datos des-identificados de vuelo”.
Los aviones no tripulados alrededor de los aeropuertos y su posible peligro para la aviación es otra área donde la gestión de datos se vuelve imprescindible. “La mayoría de los propietarios de aviones no tripulados operan estos de manera responsable; sin embargo, el número de incidentes va en aumento. La OACI está desarrollando una importante labor en la elaboración de una normativa para que los aviones no tripulados de gran tamaño convenientemente equipados puedan compartir el espacio aéreo con aeronaves tripuladas. No obstante, debemos asegurar que los aviones no tripulados de menor tamaño ?ya sean destinados a uso recreativo o comercial? se mantengan fuera del espacio aéreo utilizado para las operaciones de aproximación y aterrizaje del transporte aéreo”.
“Todas las partes interesadas debemos trabajar en un marco de colaboración basado en el uso de datos y estándares globales para aprovechar las ventajas que ofrecen los aviones no tripulados sin perjuicio de la seguridad o la eficiencia”, señaló De Juniac.