Moscú.- La Nasa estudia la posibilidad de reservar plazas en las naves rusas Soyuz para llevar a sus astronautas a la Estación Espacial Internacional (ISS) después de expirar el actual contrato en 2018, si se demora el lanzamiento de la cápsula Dragon de la empresa norteamericana SpaceX, según ha anunciado en un comunicado la compañía aeroespacial rusa Energia.
“La Nasa considera reservar tres plazas en la nave tripulada Soyuz en 2019 para hacer frente a un posible retraso de las naves privadas estadounidenses. Los vehículos espaciales rusos facilitarían las operaciones y las investigaciones de la Nasa en la ISS”, indicó Energia, según recoge el diario ruso Sputnik.
También se ha conocido el anuncio del aplazamiento del primer vuelo de la nave tripulada Dragon previsto para el próximo mes de agosto a mayo de 2018.
En 2014, SpaceX y Boeing firmaron un acuerdo con la Nasa para construir naves tripuladas. Inicialmente estaba previsto que las pruebas se iniciaran en 2017. Hasta ahora, Rusia lleva en sus naves a los astronautas estadounidenses a la plataforma orbital. EEUU sueña con volver a tener naves tripuladas propias antes de que venza el contrato con la agencia espacial rusa Roscosmos a finales del año próximo.
La Nasa por el momento no ha anunciado su intención de prorrogar el contrato y afirma que su programa de vuelos tripulados avanza conforme a lo previsto.