Washington.- La Nasa ha presentado un prototipo de 'rover' capaz de explorar las regiones cubiertas de hielo de cuerpos celestes tan lejanos como la luna Europa, uno de los satélites de Júpiter, cuyo vasto océano subterráneo podría albergar vida.
Científicos de la Nasa anunciaron ya hace tiempo su intención de enviar misiones robóticas a uno de los satélites de Júpiter. El objetivo principal es investigar si hay rastros de agua o bien, si ésta se encuentra bajo la superficie de hielo. En caso de ser así, podría ser el primer paso en el estudio de posibles formas de vida.
No es la primera vez que la Nasa pretende estudiar Júpiter. En 2011 envió la sonda Juno y se estima que llegará a su destino en 2016. Por su parte, la Agencia Espacial Europea (ESA) también envió una nave que actualmente explora gran parte de las lunas de Júpiter, incluyendo a Europa.
El robot ahora presentado, bautizado Rover Flotante para Exploración Bajo Hielo (BRUIE) está equipado con una serie de sensores e instrumentos similares al software instalado en otro 'rover' de la Nasa, el Mars Cube One, destinado a sobrevolar el planeta rojo en 2016. De acuerdo con la agencia, el BRUIE también dispondrá de un láser de gran alcance para destruir el hielo y adentrarse en el lago.
Por el momento, el rover se encuentra en el fondo de un tanque con 711.660 litros en el Centro de Ciencias de California en Los ángeles, pero en el futuro próximo, esperan los científicos, se le instalarán las ruedas para que pueda operar debajo de las superficies heladas como si estuviera en el suelo.
Sus creadores afirman que la herramienta ya puede ser utilizada para explorar el ártico y la Antártida, pero el buzo e investigador principal del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (JPL), Andy Klesh, señala que la agencia tiene grandes planes para ella, e incluso es probable que la impliquen en la misión a la luna Europa, el proyecto más esperado después de la exploración de Marte.
La misión no estaría enfocada exclusivamente hacia la búsqueda der vida extraterrestre en la luna Europa, sino que determinará también cuáles son los lugares en donde podrían hallarse indicios de microorganismos (ya sea en forma de virus o bacterias) tanto en el pasado como en el presente, similar a lo que ocurre con la misión Curiosity en Marte.
Se presume que Europa, el satélite de Júpiter, y la Tierra tendrían algo en común: agua, que es una parte fundamental en el origen de la vida.