París.– Para este miércoles se esperaba que el primer ministro francés, Manuel Valls, autorizara la adquisición por parte de la empresa conjunta Airbus Safran Lanzadores (ASL) del paquete de acciones que el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) tiene en Arianespace.
La operación, según el diarioeconómico galo Les Echos, debe reportar al Estado francés entre 100 y 200 millones de euros.
Con la adquisición del 34% en poder del CNE y la toma del control en Arianespace, la empresa ASL fusionará las actividades de lanzadores de ambos grupos convirtiéndose en líder indiscutible de la industria espacial europea que habrá de construir el lanzador Ariane 6.
La producción de este lanzador comenzará a mediados de 2016 y su primer lanzamiento está programado para 2020. Para entonces, ASL tendrá que haberse comprometido en firme en precios con la Agencia Espacial Europea (ESA).
El programa Ariane 6, que 20 Estados miembros de la ESA aprobaron a finales de 2014, tendrá que ser más barato que el Ariane 5 y habrá de competir con el Falcon de la empresa norteamericana SpaceX y otros de países emergentes.
La venta de las acciones de CNES, dada a conocer hace un año y que ya recibió la bendición de la Presidencia de la República, debería elevar al 75% la participación combinada de Airbus y Safran.