Francfort.- El Grupo Lufthansa ha ampliado su participación en el proyecto de investigación climática IAGOS (Integration of routine Aircraft measurements into a Global Observing System), a través de la instalación de equipos especiales de medición en un segundo avión.
De este modo, un Airbus A330-300 de Lufthansa, con matrícula ‘D-AIKO’, recoge en todos sus vuelos datos sobre los elementos de la atmósfera y las partículas de las nubes en altitud de crucero. Un equipo de expertos de Lufthansa Technik llevó a cabo la difícil tarea de instalar la infraestructura en la parte frontal izquierda del fuselaje de la aeronave, en colaboración con Sabena Technics, el centro de investigación Forschungszentrum Jülich y el francés CNRS.
"Apoyar la investigación climática es importante para Lufthansa, ya que nuestros aviones suponen una excelente plataforma para los instrumentos de medición. Los datos recogidos en altitud de crucero son de particular importancia para entender nuestro clima", ha afirmado Gerd Saueressig, responsable de los proyectos de investigación climática del Grupo Lufthansa.
Después de cada aterrizaje, los datos se transmiten directamente al CNRS de Toulouse, donde se encuentra la base de datos de IAGOS. Esta información es utilizada por numerosos centros de investigación de todo el mundo. El primer avión IAGOS, un Airbus A340-300, ha estado en funcionamiento desde el 7 de julio de 2011. Ese día, en cooperación con el Forschungszentrum Jülich, Lufthansa se convirtió en la primera aerolínea del mundo en poner en marcha este innovador proyecto a largo plazo en operaciones de vuelo regulares, como extensión del programa MOZAIC, que había comenzado en 1994.
El Grupo Lufthansa ha sido un socio de confianza en el campo de la investigación climática desde hace más de 20 años. En la actualidad, mantiene otros proyectos importantes además de IAGOS (por ejemplo CARIBIC y AMDAR).
En 2013, el Ministerio Federal Alemán de Educación e Investigación (BMBF) incluyó el proyecto IAGOS en su hoja de ruta nacional para infraestructuras de investigación. El consejo científico designado por el BMBF cree que la grabación continua de datos atmosféricos a nivel mundial hará posible configurar una gran fuente de conocimiento a la hora de realizar predicciones climáticas más precisas.