Mascate.- Aena ha realizado los trabajos de verificación en vuelo para los dos principales aeropuertos de Omán, los de Mascate y Salalah. La verificación de los procedimientos de navegación es un servicio necesario para comprobar que en conjunción con los sistemas de radioayuda, funcionan correctamente y así garantizar un uso seguro del espacio aéreo.
El año 2012 supuso el inicio de las actividades internacionales de la Unidad de Verificación en Vuelo, dependiente de Aena Aeropuertos Internacional y que ha sido posible gracias a la excelencia de los trabajos de calibración realizados desde su creación en 2008, con más de 4.400 horas de vuelo hasta la fecha.
La Unidad de Verificación en Vuelo de Aena Internacional acaba de completar una importante misión en el Sultanato de Omán. Si bien no es la primera vez que dicha unidad opera fuera de España (ya desde 2012 viene prestando diferentes servicios en Marruecos), se trata de la misión más larga y ambiciosa en el extranjero.
El avión laboratorio Beechcraft King Air 350 de Aena Internacional ha tenido que completar un viaje de 20 horas a lo largo de 2 días y cuatro etapas para llegar hasta Omán. Una vez allí, su misión ha consistido en la validación de los nuevos procedimientos de salidas, llegadas y aproximaciones, que la empresa Ineco ha diseñado para la ampliación de los aeropuertos de Muscate y Salalah.
La lejanía de Omán y el hecho de que ambas ciudades estén separadas más de 800 km ha supuesto un desafío en términos de logística. En total se han alcanzado las 80 horas de vuelo, en las que se ha acreditado el nivel de cualificación de los técnicos con que cuenta la Unidad.
Los vuelos de verificación son necesarios para comprobar desde el aire que tanto las maniobras como los sistemas de ayuda a la navegación aérea, instalados en tierra (radioayudas), funcionan de manera correcta y de acuerdo con con la normativa de OACI (Organización Internacional de Aviación Civil) y pueden por tanto ser usados por todas las aeronaves que realizan un vuelo instrumental.
Las calibraciones se hacen en vuelo visual y son necesarias, por tanto, buenas condiciones meteorológicas.
Se trata, pues, de la actividad dedicada a asegurar la integridad de las señales que emiten las radioayudas desplegadas en aerovías y aeropuertos, así como de los procedimientos asociados a dichas aerovías y aeropuertos, que constituyen la infraestructura del Sistema de Navegación Aeronáutica (SNA).
Para ello, el proveedor de Servicios de Navegación Aérea (en este caso Aena) debe mantener el estado y la precisión de los Sistemas, Subsistemas, Instalaciones o Equipos que constituyen el citado SNA. Este mantenimiento se lleva a cabo mediante la inspección y toma periódica de datos en vuelo desde aviones operados por pilotos especializados y técnicos de verificación en vuelo. Los datos recogidos, debidamente analizados, garantizan el uso seguro del espacio aéreo.
El sistema embarcado en el avión consta de:
– Receptores de señales de navegación
– Sistema de cálculo de posicionamiento
– Equipamiento para procesar y mostrar los datos en tiempo real y/o mediante post-procesado
– Equipo para grabación de datos.