París.- Eurocopter está decidido a restablecer su imagen tras los accidentes de varios de sus helicópteros, indicó el pasado viernes su presidente ejecutivo, Guillaume Faury.
El primer constructor mundial de helicópteros civiles, que pasará a llamarse Airbus Helicópteros el próximo 1 de enero, lamentó los dos recientes accidentes ocurridos en Escocia, aunque aún no se ha hallado la causa de los mismos.
Eurocopter lanzó la pasada semana una alerta a los operadores de sus EC135 tras el hallazgo de un indicador de combustible defectuoso en una serie de helicópteros de la misma serie que el que se estrelló en noviembre en un pub de Glasgow, accidente en el que murieron 10 personas.
A finales del pasado mes de agosto, el accidente de un Super Puma ocasionó la muerte de cuatro personas frente a las Islas británicas de Shetland.
“Cuando nuestro nombre está asociado a los accidentes en la prensa y en las redes sociales, se produce un impacto negativo sobre la marca y la empresa y por eso considero que la reducción de accidentes es una prioridad”, dijo Guillaume Faury durante un encuentro con la Asociación de Periodistas Aeroespaciales.
“Es probable que la investigación sea larga y compleja, porque los helicópteros no disponían de “cajas negras’”, agregó el presidente de Eurocopter y anunció que en el próximo año se tomarán medidas para incluir estos dispositivos a bordo con el fin de reducir en el futuro el número y la gravedad de los accidentes.
Eurocopter, principal competidor de Sikorsky, filial de la norteamericana United Technologies, y de AugustaWestland (Finmeccanica) ha triplicado su tamaño en diez años, elevando su cifra de negocios de 2.000 a 6.500 millones de euros.
Sin embargo, Faury ha señalado que el grupo registrará probablemente un crecimiento más débil en los próximos años como consecuencia de una mayor competencia en los mercados militares y civiles, sobre los que pesa decididamente la reducción de los presupuestos de defensa tanto en Europa como en EE UU.