El pasado lunes 30 de diciembre de 2024, un objeto metálico procedente del espacio impactó en la aldea de Mukuku, en el condado de Makueni, Kenia. El suceso, que ocurrió alrededor de las 15:00 horas, fue confirmado por la Agencia Espacial de Kenia (KSA), que identificó el objeto como un anillo de separación de un vehículo de lanzamiento espacial. El anillo, de aproximadamente 2,5 metros de diámetro y un peso cercano a los 500 kilogramos, es un componente habitual de cohetes que se desprende durante las fases iniciales de un lanzamiento.
Los restos de los vehículos espaciales están diseñados para desintegrarse al reingresar en la atmósfera terrestre o caer en áreas deshabitadas, como los océanos. Sin embargo, en este caso, el fragmento aterrizó en una zona poblada, un evento que la KSA ha calificado como aislado. Tras recibir información sobre el incidente, un equipo de la agencia, junto con autoridades locales y un grupo multiagencial, aseguró el área y recuperó el objeto para su análisis.
La KSA aseguró que el anillo no representa un riesgo inmediato para la seguridad pública y agradeció a los residentes de Mukuku por su colaboración en la gestión del incidente. También expresó su gratitud a los líderes locales, al equipo de respuesta y a los medios de comunicación por su rápida actuación para informar al público.
El objeto recuperado será sometido a análisis técnicos para determinar su origen exacto y su propietario, conforme a las normas internacionales del derecho espacial. La KSA se comprometió a mantener al público informado sobre los avances en la investigación y reafirmó su compromiso con la promoción de actividades espaciales seguras y responsables, tanto para las entidades keniatas como internacionales.
Este incidente subraya la creciente relevancia de las normativas internacionales en torno a los desechos espaciales y su gestión. Además, pone de manifiesto la necesidad de mejorar los mecanismos de comunicación y respuesta para abordar situaciones similares en el futuro.