La noticia de la presencia el jueves por la tarde de un hombre armado en la terminal 1 del aeropuerto internacional de Los Ángeles provocó la espontánea evacuación de unas 300 personas. La policía reaccionó y detuvo al sospechoso, pero no se encontró arma alguna, según informaron las autoridades portuarias.
Durante la evacuación descontrolada de la gente presa del pánico, al menos dos personas resultaron heridas leves.
Como resultado del incidente de seguridad, la Administración Federal de Aviación (FAA) canceló los vuelos. La Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) envió más efectivos policiales para reconducir a los pasajeros de nuevo hacia la terminal, añadió la dirección del aeropuerto, al tiempo que recomendaba a los pasajeros verificar el estado de sus vuelos y secundar las órdenes de los agentes.