SGL Carbon ha comenzado a producir en serie un tren de aterrizaje elaborado con material trenzado de fibra de carbono que se instalará en alrededor de 500 taxis aéreos en todo el mundo durante los próximos dos años.
Para optimizar el alcance de los taxis, cada gramo cuenta. Con una medida de aproximadamente dos metros de largo y 1,5 metros de ancho, el patín de aterrizaje ultraligero pesará menos de tres kilogramos, por lo que es aproximadamente un 15% más liviano que un componente similar hecho de aluminio. Esto aumenta la capacidad potencial de tiempo de vuelo del taxi aéreo, que es un diferenciador clave para el operador del taxi aéreo.
“Con nuestro tren de aterrizaje ayudamos a dar forma a esta nueva y prometedora aplicación de aviación civil tripulada y autónoma. Esta participación también demuestra nuestra amplia gama de servicios. Desde la ingeniería, hasta la fabricación de prototipos, la producción en serie con nuestros propios materiales y todas nuestras competencias a lo largo de toda la cadena de valor contribuyeron al proyecto”, asegura Andreas Erber, jefe del segmento Aeroespacial del negocio de Compuestos – Fibras y Materiales de SGL Carbon.
Las fibras de carbono para el desarrollar este tren de aterrizaje se producen en la planta que SGL Carbon tiene en Muir of Ord (Escocia). La parte final se fabrica en las instalaciones de la compañía en Innkreis (Austria).