La agencia espacial rusa Roscomos encenderá el próximo viernes por la noche encenderá los motores de la nave de carga Progress MS-27, que permanece acoplada al módulo de servicio Zvezda, para elevar la órbita de la Estación Espacial Internacional (ISS).
Las maniobras de reactivación se producen periódicamente para restaurar la altitud del laboratorio en órbita a medida que se degrada con el tiempo debido a la gravedad de la Tierra y la resistencia atmosférica.
La nave de carga rusa atracó el pasado 17 febrero de forma automática en la ISS con unas dos toneladas y media de carga: repuestos, materiales para experimentos científicos, alimentos y artículos médicos y de higiene para la tripulación de la Estación, además de 580 kilos de propelentes, 420 kilos de agua potable, y otros 40 de nitrógeno a presión.
La Progress MS-27 tiene previsto permanecer el la ISS hasta el próximo mes de agosto en que partirá con materiales de desecho que se destruirá con la cápsula en su reentrada controlada en la atmósfera terrestre al final de su misión.