Orion, con el Módulo de Servicio Europeo (MSE) construido por Airbus, ya está completo y listo para iniciar el proceso de abastecimiento de combustible en el Centro Espacial Kennedy, Florida, según informa el constructor aeroespacial europeo.
Tras la integración de los paneles solares de siete metros de largo en las instalaciones de Airbus en los Países Bajos hace unas semanas, la nave espacial Orion de la Nasa que llevará a la tripulación Artemisa II a la Luna y de regreso el año que viene ahora estará cargada con propulsores, gases de alta presión, refrigerante y otros fluidos que la nave espacial y la tripulación necesitarán para maniobrar y llevar a cabo su viaje de 10 días.
Más de 50 años después del primer alunizaje tripulado en 1969, la Nasa se propone visitar de nuevo el satélite terrestre, no solo por unos días, sino para sentar las bases de un puesto de avanzada tripulado permanentemente a largo plazo. En el marco de su programa Artemisa, la Nasa planea regresar a la Luna.
Europa y Airbus están desempeñando un papel importante en este ambicioso proyecto: por primera vez, la Nasa ha confiado a una empresa no estadounidense la construcción de un elemento crítico para una misión de vuelo espacial humano de Estados Unidos.
En virtud de un contrato de la Agencia Espacial Europea (ESA), Airbus es responsable de construir el Módulo de Servicio Europeo (ESM), que propulsa y maniobra la nave espacial Orion y proporciona agua y oxígeno a la tripulación, además de regular el control térmico.
La nave espacial Orión consta de dos partes principales: el Módulo de Tripulación, que alberga hasta cuatro astronautas y su carga, y el Módulo de Servicio, construido en las instalaciones de Airbus en Bremen. Ambos módulos se conectan mediante el Adaptador del Módulo de Tripulación.