La Nasa ha publicado una solicitud de propuesta de la industria estadounidense para el Vehículo de Deorbitación de EEUU (USDV), una nave espacial destinada a desorbitar de forma segura la Estación Espacial Internacional (ISS) como parte de su retiro planificado. Para maximizar el valor para el gobierno y mejorar la competencia, la adquisición permitirá a los oferentes flexibilidad al proponer un precio fijo firme o una tarifa de incentivo de mayor coste para la fase de diseño, desarrollo, prueba y evaluación. El resto del contrato será a precio fijo.
Desde 1998, cinco agencias espaciales (la Agencia Espacial Canadiense, la Agencia Espacial Europea, la Agencia de Exploración Aeroespacial del Japón, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio y la Corporación Espacial Estatal “Roscosmos”) han operado la ISS y cada una de ellas es responsable de gestionar y controlar el hardware que proporciona. La estación fue diseñada para ser interdependiente y depende de las contribuciones de toda la asociación para funcionar. Estados Unidos, Japón, Canadá y los países participantes de la ESA se han comprometido a operar la estación hasta 2030 y Rusia hasta al menos 2028.
Una vez finalizado el programa de la ISS, la estación será desorbitada de forma controlada para evitar zonas pobladas. La salida segura de la ISS es una responsabilidad compartida de las cinco agencias espaciales a través de contribuciones de socios basadas en el porcentaje masivo de propiedad de cada agencia. En el futuro, Estados Unidos planea realizar la transición de sus operaciones en órbita terrestre baja a plataformas de propiedad y operación comercial para garantizar el acceso y la presencia continuos en el espacio para la investigación, el desarrollo tecnológico y la colaboración internacional.
En un esfuerzo de años, la Nasa y sus socios estudiaron los requisitos de salida de órbita y previamente desarrollaron una estrategia y un plan de acción preliminares que evaluaron el uso de múltiples naves espaciales Progress de Roscosmos para apoyar las operaciones de salida de órbita. Estos esfuerzos indican ahora que una nueva solución de nave espacial proporcionaría capacidades más sólidas para un desorbitamiento responsable. Para iniciar el desarrollo de esta nueva nave espacial, la Nasa publicó la solicitud de propuesta.
El USDV se centra en la actividad final de salida de órbita. Será un nuevo diseño de nave espacial o una modificación de una nave espacial existente que debe funcionar en su primer vuelo y tener suficiente redundancia y capacidad de recuperación de anomalías para continuar con el proceso crítico de desorbitación. Como ocurre con cualquier esfuerzo de desarrollo de este tamaño, el USDV tardará años en desarrollarse, probarse y certificarse.