Inmarsat, especialista en comunicaciones móviles por satélite, y el fabricante aeronáutico Boeing han llegado a un acuerdo para transformar digitalmente las aeronaves. En concreto, a través de la innovadora tecnología Smart pipe, proporcionará conectividad de banda ancha en vuelo de los nuevos aviones Boeing 777X.
La nueva infraestructura ha sido diseñada para asignar de forma independiente el ancho de banda de conectividad a múltiples aplicaciones. Esto permite a las aerolíneas desbloquear importantes beneficios operativos, como el mantenimiento predictivo, la optimización de rutas, la gestión modernizada del tráfico aéreo y las comunicaciones de la tripulación en tiempo real, al tiempo que ofrece un entretenimiento mejorado para los pasajeros, que incluye Internet de alta velocidad y televisión en vivo.
Philip Balaam, presidente de Inmarsat Aviation, dijo que “GX Aviation y SB-S de Inmarsat ya están establecidos como las soluciones de conectividad global más avanzadas de la industria de la aviación. Ahora, con la suma de la funcionalidad de Smart pipe, estamos allanando el camino para un futuro más conectado e integrado, que es crucial para las aerolíneas de todo el mundo que están transformando sus negocios con el poder de la tecnología digital”.
“Este es un hito importante en el desarrollo de la aeronave verdaderamente conectada y refuerza el papel clave de Inmarsat en servir a la industria de la aviación con un conjunto de servicios operativos y de conectividad de pasajeros. Los resultados de las pruebas iniciales para nuestra Smart pipe son prometedores y esperamos continuar nuestra colaboración con Boeing en preparación para la próxima entrada en servicio de su nuevo avión 777X”, explica Balaam.
De este modo, esta tecnología de Inmarsat estará inicialmente disponible para las aerolíneas que hayan pedido o planeen pedir el Boeing 777X. Además, estas capacidades estarán disponibles como actualizaciones en otros modelos de aeronaves.