La Junta de Accionistas de Indra ha ratificado, por amplia mayoría, a Marc Murtra como presidente no ejecutivo, así como a Ignacio Mataix y Cristina Ruiz como consejeros delegados.
Además, los accionistas han aprobado las cuentas anuales, el informe de gestión del consejo de administración y el informe de sostenibilidad. También han adoptado por una amplia mayoría todos los acuerdos propuestos por el consejo de administración como la aprobación y reelección de Marc Murtra como consejero con la condición de otro externo y de Ana María de Pro como consejera independiente; así como la reelección de Enrique de Leyva e Ignacio Martín como consejeros independientes y de Ignacio Mataix y Cristina Ruiz como consejeros ejecutivos.
Murtra destacó en su intervención que “hay muchas razones para mirar al futuro con confianza e ilusión. Indra dispone de un sólido posicionamiento estratégico, comercial y de negocio y de un equipo de profesionales extraordinario y queremos ser protagonistas de una industria global de alto dinamismo y potencial que puede generar mucho valor para España en un momento de recuperación en el que las ayudas europeas van a impulsar proyectos e inversiones en muchas de nuestras áreas de fortaleza y expertise tecnológica”.
“Mi objetivo como presidente es contribuir desde mi trayectoria, conocimiento y experiencia a potenciar las fortalezas de Indra y apoyar a los responsables ejecutivos desde el liderazgo del Consejo y a través de las funciones que me han sido encomendadas”, aseguró el nuevo presidente.
Mataix y Ruiz repasaron las tendencias y estrategias de las dos divisiones de la compañía (Transporte y Defensa y Minsait, división de Tecnologías de la Información y Transformación Digital). Afirmaron que la compañía, en sus dos negocios, inicia una nueva etapa con unas bases sólidas para continuar y profundizar en su estrategia de crecimiento y rentabilidad y con grandes perspectivas de éxito para reforzar su liderazgo en los ámbitos tecnológicos en los que compite
Al respecto, señalaron que el primer reto de Indra es cumplir con el guidance para 2021, anunciado a los inversores. En concreto, Indra espera superar los 3.200 millones de euros de ingresos en moneda constante, obtener un EBIT superior a los 200 millones de euros y lograr un Flujo de Efectivo Libre en 2021 de más de 120 millones de euros, antes de la salida de efectivo por los planes de transformación de la plantilla.
Los consejeros delegados recordaron que, a pesar del endurecimiento de la pandemia durante el segundo semestre, Indra cumplió en 2020 con los objetivos comprometidos para el ejercicio con los inversores y accionistas en el mes de julio de dicho año, y destacaron que Indra consiguió que su cartera alcanzase un nivel histórico, creciendo un 15,9% hasta los 5.229 millones de euros, mientras que la contratación neta se elevó un 8,4%, ascendiendo a 3.850 millones.
“Hoy tenemos un negocio de Transporte y Defensa muy sólido y con excelentes perspectivas estratégicas”, afirmó Igacio Mataix, quien apuntó que la ambición para el negocio de T&D es “recuperar lo antes posible nuestra senda de crecimiento rentable, liderando desde la innovación tecnológica los sectores del ámbito del Transporte, Aeroespacial y de Defensa en los que somos una referencia industrial y tecnológica”.
Esta visión positiva se basa en aspectos como los éxitos conseguidos en la evolución y transformación de la oferta del segmento de Transportes y, especialmente, en la reorientación estratégica del área de Defensa hacia los grandes programas. En este punto, sobresale el rol estratégico que Indra está adquiriendo en el FCAS (futuro avión de combate europeo) y el liderazgo y participación muy destacada en los programas europeos de desarrollo industrial de la Defensa, que aseguran su presencia en los desarrollos tecnológicos que marcarán las próximas décadas en la defensa europea.