Eurocontrol acaba de publicar sus previsiones de vuelo y de CO2 a largo plazo, analizando cómo evolucionará la aviación en los próximos 25 años, así como el camino hacia emisiones netas de CO2 cero en 2050.
A pesar de la pandemia del Covid-19, que provocó una importante caída a corto plazo del tráfico, se espera que el número de vuelos en Europa crezca en los próximos 25 años hasta alcanzar los 15,4 millones de vuelos en 2050, un aumento del 52% en comparación con los niveles de 2023.
Al mismo tiempo, en consonancia con los objetivos europeos y de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), el sector de la aviación se ha comprometido a lograr emisiones netas de carbono cero para 2050. La buena noticia es que, cuando hay voluntad, hay un camino.
Tres áreas principales contribuirán a este ambicioso objetivo: el desarrollo de combustibles de aviación sostenibles (SAF), mejoras en las flotas y la tecnología; y la modernización de los aeropuertos, las operaciones y la infraestructura de gestión del tráfico aéreo, en particular a través de la innovación. Además, seguirán siendo necesarias medidas fuera del sector para lograr el objetivo de emisiones netas cero.
“En general, la industria de la aviación dependerá en gran medida de incentivos financieros y de un marco regulatorio adecuado para cumplir sus compromisos”, concluye Raúl Medina, director general de Eurocontrol
En el escenario más probable, se prevén unos 15,4 millones de vuelos en el Espacio Europeo de Aviación Civil (CEAC) de aquí a 2050, lo que supone un 52% más que en 2023 (un 39% más que en 2019), lo que equivale a un crecimiento medio anual del 1,6% durante el periodo 2023-2050 (un 1,1% durante el periodo 2019-2050). Las crecientes limitaciones en algunos aeropuertos importantes, que operarán cerca o al máximo de su capacidad en 2050, seguirán ejerciendo presión sobre toda la red.
Para alcanzar el ambicioso objetivo de cero emisiones netas de CO2 para 2050, esta perspectiva describe los principales facilitadores. En lo que respecta a las mejoras de la flota y la tecnología, el ritmo de renovación de la flota con aviones más eficientes en términos de consumo de combustible será clave, así como el desarrollo y uso eficaz de aviones eléctricos y propulsados por hidrógeno.
A su vez, las operaciones y la infraestructura tienen un papel que desempeñar, incluida la innovación en los aeropuertos y las infraestructuras ATM a través de las soluciones SESAR, así como la mejora de la eficiencia en la coordinación entre todos los actores operativos.
Los combustibles de aviación sostenibles (SAF) son otra solución prometedora; en este caso, la ampliación de la producción para satisfacer la demanda y la evolución del precio de los SAF serán fundamentales, ya que su disponibilidad es actualmente limitada y costosa. Por último, lo que no se pueda gestionar con lo anterior para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas tendrá que cubrirse con medidas fuera del sector, como las medidas basadas en el mercado, la compensación y captura de carbono, cuya integridad y eficacia serán fundamentales para garantizar que realmente reduzcan las emisiones.
Sin ninguna medida significativa, prevemos que los vuelos de la CEAC emitirán 271 Mt de CO2 para 2050 (si no hay renovación de la flota, la previsión es de 294 Mt de CO2). Para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas, los factores clave de sostenibilidad identificados requerirían ahorros:
– 53 Mt (20% de las emisiones totales de carbono en 2050) de la flota y la tecnología)
– 27 Mt (10%) de operaciones e infraestructuras (incluida innovación en ATM)
– 90 Mt (33%) de Combustibles de Aviación Sostenibles (SAF).
Y la brecha restante para alcanzar el cero neto (101 Mt o 37%) tendría que cubrirse con medidas fuera del sector (como medidas basadas en el mercado, compensación de carbono y captura de carbono).