La empresa española Escribano Mechanical & Engineering, dedicada a la innovación y tecnologías de vanguardia en el sector Aeroespacial, Defensa y Seguridad, participa en el proyecto CERVUS III, el sistema de control de equipos remotos y vehículos no tripulados de vigilancia electrónica que posicionará a España a la vanguardia mundial en sistemas antidrones.
CERVUS III ha sido presentado este miércoles en el ‘Taller con empresas “15” Fuerza 2035, Mando y Control en la Protección de un Puesto de Mando’ cuyo objetivo es acercar las posibilidades existentes en el mercado nacional a las necesidades de las unidades del Ejército de Tierra identificadas en el desarrollo del concepto Ejército 35, así como realizar prospectiva de necesidades futuras en lo que respecta a medios, tecnologías y productos relacionados con las funciones de mando y protección.
La solución CERVUS nació inicialmente como respuesta a la necesidad de investigar si los medios actuales de guerra electrónica de dotación del Regimiento de Guerra Electrónica n.º 31 eran capaces de realizar la detección temprana de amenazas tipo RPAS y ha evolucionado hasta dar lugar a un sistema antidrón completo, eficaz y 100% nacional como CERVUS III.
Tanto CERVUS I como CERVUS II, son sistemas tipo ‘softkill’ que basan su actuación en medidas de guerra electrónica para la detección, identificación y seguimiento, además de la inhibición, pero sin la posibilidad de integrar un sistema de armas que pueda abatir los RPAS. Este sistema está compuesto por un módulo de detección, que incluye un analizador del espectro de radiofrecuencias, con el que se consigue detectar los tráficos de emisiones entre el operador y el RPAS, a lo que se une un equipo de vídeo con cámara óptica. Con esto se consigue detectar cualquier dron en un perímetro determinado de, como mínimo, 500 metros.
Es en CERVUS III, la tercera evolución del proyecto, cuando se crea una solución antidrón completa que integra medidas ‘softkill’ y ‘hardkill’ para una protección superior ante estas amenazas.
En esta tercera fase, la compañía TRC ha integrado en un único conjunto defensivo el radar S-3D de la empresa ART (Advanced Radar Technologies), las diferentes partes del CERVUS I y II y el sistema optrónico OTEOS y la estación remota Guardian 2.0 (seleccionada en el Vehículo 8X8 ‘Dragón’) de Escribano M&E, que permite montar dos tipos de armas, la Dillon Areo Minigun M134D o bien el Mk-19.
En el primer caso se trata de un cañón rotatorio multitubo de 7,62 mm de alta cadencia de tiro (entre 2.000 y 6.000 disparos por minuto), mientras que la segunda es un lanzagranadas de 40 mm preparado para utilizar munición del tipo “Airburst” o de fragmentación (ABM 40 mm de NAMMO).
La solución CERVUS III permite la detección y clasificación, bien sean por análisis de frecuencias, visual o radar, la inhibición y el derribo de cualquier amenaza RPAS. Además, es una solución 100% española, surgida gracias a la colaboración entre compañías nacionales, que ha sido probada por las Fuerzas Armadas españolas y que posiciona a España a la vanguardia en este tipo de sistemas.
La posibilidad de drones armados en manos de grupos terroristas es muy real, urge desarrollar sistemas antidron. Sin embargo, las pruebas realizadas en el polígono de Médano del Loro ya demostraron que conocer la presencia de un dron y dispararle «manualmente» con una minigun del 7.62×51 o un lanzagranadas del 40×53 no logró ningún derribo. La primera no produce realmente un «muro de plomo», es más bien como tratar de darle a un colibrí con un látigo gordo. Lo segundo usa munición muy lenta, necesita ~1seg para recorrer 200m, en ese tiempo un dron a 150km/h se ha movido 42m. Un software podría predecir su trayectoria siempre que esta sea constante, algo que se da en granadas y cohetes (ahí el exito del LPWS americano), pero un dron es otro cantar. Quizá deberían tratar de encajar dos lanzagranadas en la Sentinel para saturar mas espacio posible a donde pudiera desplazarse el dron, o considerar el XM914 con munición LW30 (menor carga explosiva que las granadas de NAMMO pero casi 5 veces más veloz), como en el Stryker IM-SHORAD?