El Gobierno alemán, que había vetado la exportación del Eurofighter a Arabia Saudí desde el pasado verano por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi a finales de 2018, impidiendo en particular un pedido de 48 Eurofighter Typhoon, se muestra ahora abierto a esa venta, según manifestó el pasado domingo la ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock. “El canciller alemán Olaf Scholz comparte la posición expresada por la ministra Baerbock”, dijo este lunes en Berlín el portavoz del Gobierno.
El programa Eurofighter está liderado por Reino Unido, Alemania, Italia y España. Por eso Alemania tiene derecho de veto en las decisiones de exportación. Se fabrican en el Reino Unido, que estaría dispuesto a suministrarlos a Arabia Saudí.
Hasta ahora, Olaf Scholz, se había opuesto a las presiones para desbloquear la entrega de los aviones Eurofighter a Arabia Saudí. Su socio de coalición, Los Verdes, se oponían firmemente a la medida, señalando las preocupaciones por los derechos humanos y el papel de Arabia Saudí en la guerra de Yemen.
El CEO de Airbus, Guillaume Faury, en declaraciones al diario germano Handelsblatt publicadas en el pasado mes de octubre, criticó las restrictivas normas alemanas para la exportación de armas como un obstáculo para los proyectos de defensa europeos. “La actitud del gobierno alemán hacia las exportaciones de armas a algunos países representa un problema real. Si Alemania quiere ser un socio fiable en grandes proyectos armamentísticos, debe resolver la cuestión de los controles de exportación con los demás europeos y no contra ellos”.
El Eurofighter es el principal motor de ingresos de Airbus Defence and Space, la segunda división del grupo con 11.200 millones de euros. Faury dijo que la decisión alemana tuvo «consecuencias muy negativas». Berlín detuvo la venta de armas a Arabia Saudí tras el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en el interior del consulado saudí en Estambul en 2018.
Ante el bloqueo alemán a las exportaciones de Eurofighter a Arabia Saudita, ésta pidió hace tres meses a Dassault Aviation presupuesto para la adquisición de 54 aviones de combate Rafale.