Niel Golightly ha cesado el viernes como vicepresidente senior de Comunicaciones de Boeing debido a la denuncia de un empleado que llamó la atención de la compañía sobre un artículo que escribió en 1987 mientras servía en el Ejército, sobre si las mujeres deberían servir en combate.
Boeing señala que no está de acuerdo con las opiniones expresadas en el artículo y que éste no refleja las opiniones actuales de Niel Golightly. «Mi artículo era la contribución equivocada de un piloto de la Armada de la Guerra Fría de 29 años a un debate en vivo en ese momento. Mi argumento fue vergonzosamente equivocado y ofensivo. El diálogo que siguió a su publicación hace 33 años me abrió los ojos rápidamente, cambió de opinión de manera indeleble y formó los principios de equidad, inclusión, respeto y diversidad que han guiado mi vida profesional desde entonces. El artículo no es un reflejo de quién soy; pero, sin embargo, he decidido que, en interés de la empresa, presento mi dimisión», dijo Golightly.
«Niel y yo discutimos extensamente el artículo y sus implicaciones para su papel como portavoz principal de la compañía», dijo David Calhoun, presidente y CEO de Boeing. “Respeto mucho a Niel por dimitir en interés de la empresa. Le agradezco sus contribuciones a la compañía Boeing, que han sido sustanciales incluso en poco tiempo. Nuestro Consejo de Administración y yo le agradecemos y le deseamos todo lo mejor en sus esfuerzos futuros”.
«Quiero subrayar el compromiso implacable de nuestra compañía con la diversidad y la inclusión en todas sus dimensiones, y asegurar que todos nuestros empleados tengan la misma oportunidad de contribuir y sobresalir». concluyó Calhoun.
Boeing ha iniciado la búsqueda de un sucesor. Mientras tanto, la responsabilidad de la Comunicación será de Greg Smith, vicepresidente ejecutivo de operaciones empresariales y director financiero, hasta que se nombre un sucesor definitivo.
¿Es lógico prescindir de un empleado competente por algo que opinaba hace 33 años? A mí me parece que no. Todo el mundo evoluciona con el tiempo, por cierto las leyes también. Lo que piensa ese señor hoy puede ser distinto de lo que pensaba, como de hecho lo es, y lo que hoy es poco afortunado o incluso ilegal, en ocasiones no lo era hace 33 años. Si hubiera sido un delito, podría entenderse, pero incluso los delitos prescriben. Sin ir más lejos en España, salvo terrorismo o genocidio, los homicidios prescriben a los veinte años, y los delitos de injurias al año. Resulta llamativo «lo fino que se hila» a veces en los EE. UU. sobre algunas cuestiones. Este señor que se tiene que ir a casa por algo que escribió tiempo atrás, en muchos lugares de los mismos EE. UU. puede llevar legalmente por la calle un fusil de asalto colgado del hombro (por supuesto cargado) y los transeúntes ni le van a mirar