Bombardier anunció el pasado jueves el acuerdo definitivo para vender su negocio de aeroestructuras a Spirit AeroSystems Holding, que respalda la decisión estratégica de Bombardier de centrarse en sus dos pilares de rápido crecimiento, aviones de negocios y trenes.
Con esta transacción, Spirit adquirirá el negocio de aeroestructuras y posventa de Bombardier en Belfast, Reino Unido; de Casablanca, en Marruecos; así como también en Dallas, EEUU, instalaciones de mantenimiento, reparación y reacondicionamiento de aeroestructuras por una contraprestación en efectivo de 500 millones de dólares y la reversión de pasivos con un valor contable total superior a 700 millones de dólares, incluidos anticipos gubernamentales reembolsables y pasivos por pensiones.
Después de la transacción, Spirit continuará suministrando componentes y repuestos de aeronaves estructurales para apoyar la producción y el servicio de aeronaves de las líneas Learjet, Challenger y Global de Bombardier Aviation.
Se espera que los ingresos de 2019 para estas actividades sean de aproximadamente 1.000 millones de dólares. La transacción sigue a la creación de Bombardier Aviation a principios de este año y se desprende de su negocio de aeroestructuras para centrarse en sus capacidades estratégicas ubicadas en Montreal, México y sus operaciones de ala de aviones Global 7500 en Texas.
Además, la transacción fortalece la liquidez de Bombardier a medida que la compañía pasa a la fase de desapalancamiento de su plan de recuperación. Se espera el cierre de la transacción en el primer semestre de 2020, sujeto a aprobaciones regulatorias y condiciones de cierre habituales.
«Esta transacción es otro paso estratégico en la redefinición de nuestra cartera para enfocarnos en nuestros sólidos segmentos de negocios de aviones y ferrocarriles», dijo Alain Bellemare, presidente y director ejecutivo de Bombardier Inc. Creemos que la adquisición de Spirit de estos activos de aeroestructuras es la mejor solución para nuestros clientes, empleados y accionistas. Estamos comprometidos a garantizar una transición fluida y ordenada».