Chicago.- Boeing recortará en un 20% la producción de sus aviones 737 a partir de la semana próxima y creará una comisión especial dentro de la junta directiva para revisar la seguridad y el diseño de este avión tras las dos recientes tragedias que ocasionaron 346 muertos y provocaron que los reguladores de todo el mundo ordenaran paralizar el modelo más nuevo y más vendido.
El constructor aeronáutico norteamericano reducirá temporalmente su tasa de producción de 52 a 42 aviones al mes. Boeing pretende coordinarse con clientes y proveedores para mitigar el impacto financiero de esta reducción de la producción sin que por ahora piense en recortar empleos en el programa 737, dijo el director ejecutivo de Boeing, Dennis Muilenburg.
Las entregas del avión más vendido de Boeing se congelaron tras la suspensión de sus vuelos el pasado mes de marzo después de la tragedia de un avión de la compañía Ethiopian Airlines que sucedía a otro accidente similar de un 737 MAX de la aerolínea indonesia Lion Air.
“Boeing ahora sabe que una cadena de eventos provocó ambos desastres y que la activación indebida del software MCAS para evitar la entrada en pérdida ha sido ‘un elemento común’ en ambos casos”, dijo Muilenburg en un comunicado este viernes. “Cuando el Max regrese a los cielos, les prometimos a nuestros clientes de las aerolíneas y a sus pasajeros y tripulaciones que volará de manera tan segura como cualquier avión”, añadió el presidente ejecutivo del constructor aeronáutico norteamericano.
Boeing tenía previsto aumentar en un 10% para mediados de este año la producción del 737, un avión apetecido por las compañías aéreas de bajo coste que ofrecen billetes a precios más baratos. Los proveedores que suministran las 600.000 piezas necesarias para cada avión ya habían comenzado a avanzar a un ritmo mensual de 57 aviones bajo un calendario cuidadosamente organizado y establecido mucho antes de las tragedias de Lion Air y Ethiopian Airlines.
Con el 737 Max ahora puesto en tierra por tiempo indefinido, la desaceleración de la producción ayudará a Boeing a preservar el efectivo. El fabricante se enfrenta a pérdidas entre 1.500 y 2.700 millones de dólares al mes, ya que los clientes suspenden los pagos por adelantado de los aviones cuyas entregas están suspendidas, dijo Seth Seifman, analista de JP Morgan.
El anuncio de Boeing se produce un día después de que las autoridades etíopes publicaran un informe preliminar sobre el último accidente del Max, en el que se concluye que el avión de Ethiopian Airlines experimentó el mismo fallo técnico que el avión de Lion Air.
Si los reguladores se toman su tiempo para certificar el regreso de Max a los cielos, Boeing se vería obligado a guardar cientos de aviones recién salidos de fábrica en aeropuertos de todo el oeste de EEUU hasta que se reanuden los vuelos comerciales.
La reducción anunciada repercute en los proveedores que contrataron trabajadores e invirtieron para ampliar su capacidad.