Francfort.- Fueron siete horas de viaje al punto de partida sin explicación alguna, según algunos de los pasajeros del A380 de la compañía Lufthansa, que el pasado lunes viajaban en el vuelo LH440 desde Francfort a Houston y que a mitad de camino se dio la vuelta y regresó al aeropuerto de origen.
El avión acababa de sobrevolar Islandia cuando el piloto decidió dar la vuelta, por lo que voló un total de 3.500 millas, una distancia similar a la que separa a Londres de Nueva York. El vuelo aterrizó sin problemas en Francfort casi siete horas después de despegar del mismo aeropuerto.
Un pasajero indicó que se les dijo que uno de los motores había goteado aceite pero que en esos momentos estaba bien, pues los técnicos de mantenimiento habían trabajado en el motor antes del vuelo.
Otro viajero coincidió al afirmar que regresaron a Francfort debido a una fuga de aceite en un motor. Otro tercero escribió en un comentario anónimo en una web: “Iba en ese vuelo. Fue terrible. El capitán nos dijo que sabían de la fuga antes del despegue, pero que podríamos llegar fácilmente a Houston con 3 motores. Sin embargo, Lufthansa decidió que el avión regresara a Francfort. Tras el aterrizaje, tuvieron que llamar a la policía porque los pasajeros estaban demasiado agresivos con el incompetente personal de Lufthansa”.
Otros supuestos del vuelo LH 440 expresaron el estupor que sintieron al ver en las pantallas frente a sus asientos que el avión se desviaba por completo de su ruta sin contar con ninguna explicación.