Madrid.- Indra reforzará su liderazgo en el mercado de gestión de tráfico aéreo y aeroespacial”, como suministrador de las soluciones más avanzadas de gestión de tráfico, defensa aérea, simulación, aviónica o tecnologías para el sector espacial, según ha anunciado su presidente, Fernando Abril-Martorell.
Durante su intervención en la apertura del “I Foro Latinoamérica, España y Europa: una mirada a la cooperación aeroespacial”, que se desarrolla a lo largo de este jueves en la sede social de Indra, Abril-Martorell indicó que su firma fortalecerá su posición como compañía pionera en el desarrollo de la nueva generación de sistemas de gestión de tráfico aéreo y seguirá comprometida como uno de los socios más importantes dentro del programa europeo SESAR, pilar tecnológico del futuro Cielo único Europeo.
Abril-Martorell añadió que “Indra crecerá en este mercado aprovechando las nuevas oportunidades de negocio que ofrece la navegación por satélite o la nueva generación de tecnología de vigilancia radar”.
La inauguración del Foro también contó con las intervenciones del presidente de la Fundación Chile-España, Alfonso Merry del Val; el presidente de TEDAE, Adolfo Menéndez; el director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Daniel Calleja Crespo; y el secretario de Estado de Comercio del Ministerio de Economía y Competitividad, Jaime García-Legaz.
Indra cuenta con un modelo de negocio diferencial basado en el desarrollo de soluciones propias, de forma particularmente relevante en el ámbito de la industria aeronáutica y aeroespacial. “Nuestra compañía aporta una de las más innovadoras, sólidas y reconocidas ofertas de servicios y soluciones capaces de cubrir las necesidades más exigentes de la industria aeronáutica”, destacó Abril-Martorell, que añadió que “Indra es uno de los principales operadores del mercado global”.
Como ejemplo de este liderazgo, Abril-Martorell mencionó proyectos de la compañía tan diversos como el suministro de sistemas y radares de defensa aérea para la OTAN y países como Omán, Portugal, Ecuador, Uruguay o Guatemala, entre otros; el desarrollo de la generación de sistemas iTEC que ordenarán el tráfico aéreo en Alemania, España, Reino Unido y Holanda; la exportación de sus sistemas de simulación a más de 20 países; o el despliegue del segmento terreno de los futuros satélites de observación de la Tierra españoles Ingenio y Paz y la participación en programas espaciales europeos tan emblemáticos como Galileo o Copernicus, entre otros.
La compañía ocupa una posición de liderazgo en el desarrollo de sistemas de tráfico aéreo en todas sus fases, cubriendo el desarrollo de sistemas de automatización de la gestión del tráfico aéreo, las comunicaciones, la navegación y la vigilancia radar.
Los sistemas de Indra intervienen tecnológicamente en más de un tercio del control de todo el tráfico aéreo mundial. En este sentido, los sistemas instrumentales de Indra han respaldado unos 100 millones de aterrizajes seguros en más de 1.200 pistas de los principales aeropuertos del mundo; sus radares primarios fueron los más vendidos en 2014 fuera de Estados Unidos; y los radares secundarios de la compañía están operativos en 175 instalaciones de todo el mundo.
Respecto al suministro de sistemas de aviónica embarcada, más de 500 plataformas aéreas están protegidas con sistemas de defensa electrónica de Indra, incluida toda la flota de los A400M en 9 países. La compañía participa además en los consorcios que desarrollan el radar Captor y el sistema de defensa aérea DASS Praetorian del Eurofighter, equipos que aportan la superioridad aérea característica de este caza. También trabaja en el desarrollo de Aeronaves Remotamente Tripuladas (RPAs), habiendo desarrollado el helicóptero no tripulado Pelícano mientras que aborda ahora la adaptación de su avión ligero de vigilancia marítima P2006T para convertirlo en el primer Avión Opcionalmente Tripulado desarrollado en España.
El presidente de Indra destacó en la inauguración del Foro la necesidad de promover iniciativas europeas para el desarrollo tecnológico en el ámbito aeronáutico y espacial, “que pueden tener un determinante efecto multiplicador en nuestras economías”. Para ello, afirmó que “será imprescindible poner en marcha esquemas de cooperación industrial con visión de conjunto, disponer del apoyo de las instituciones europeas y nacionales, generar economías de escala e impulsar una economía basada en el talento y conocimiento”.
Abril-Martorell añadió que “contemplamos un futuro en el que un mayor desarrollo de nuestra industria, que por definición es de alto valor añadido, aportará a la sociedad un incremento de actividad científica, tecnológica y manufacturera, que redundará en una mayor riqueza en todos los sentidos, pero en especial en el de las personas, su formación y su nivel de vida”.