Cabo Cañaveral.- De nuevo surgieron los problemas con el equipo espacial de uno de los dos astronautas de la Nasa que ayer volvieron a salir de la Estación Espacial Internacional (ISS) para efectuar un tendido de cables y lubricación en el exterior del laboratorio orbital. El casco de Terry Virts acabó con una pequeña cantidad de agua en su interior.
El incidente ha hecho recordar el caso del astronauta italiano de la Agencia Espacial Europea (ESA), Luca Parmitano, que el 20 de agosto de 2013 estuvo cerca de ahogarse al llenarse de agua su casco durante una salida de la ISS. La semana pasada hubo que retrasar 24 horas la primera salida de la estación de los dos mismos astronautas que lo hicieron ayer por la comprobación a última hora de sus trajes espaciales y evitar problemas como el ahora surgido de nuevo.
Esta vez la cantidad de agua fue relativamente pequeña, en esencia una masa grande que flotaba dentro del casco de Terry Virts. éste nunca estuvo en peligro, aseguró el Control de la Misión, y él no informó de la presencia de agua en el casco en las seis horas y media que estuvo en el exterior de la estación.
Esta ha sido la segunda salida espacial en cinco días para los astronautas Virts y Butch Wilmore de la Nasa, quienes tuvieron problemas en la instalación de cables para futuras cápsulas tripuladas estadounidenses, que deben llegar en un par de años.
Se habían planeado tres salidas espaciales y la próxima estaba prevista para el próximo domingo, pero en este momento no se sabe si se llevará a cabo dado el percance de ayer. Los directivos se reunirán mañana, como estaba programado, para analizar la situación.
La salida de ayer concluyó y los dos astronautas se hallaban dentro de un compartimiento hermético cerrado cuando ocurrió el incidente. El compartimiento estaba siendo represurizado cuando Virts notó el agua. La almohadilla absorbente en la parte trasera del casco estaba húmeda pero no saturada, dijo la astronauta italiana Samantha Cristoforetti, una de los seis tripulantes de la estación. La almohadilla se convirtió en un componente de rigor después de la emergencia de 2013.
Cristoforetti le quitó el casco a Virts y le limpió la cara con una toalla una vez que salió del compartimiento hermético para reunirse con sus colegas. Notó que tenía el cuello húmedo y frío.
El agua probablemente se filtró del sistema de enfriamiento del traje, la fuente de la filtración en 2013. El Control de la Misión dijo que la cantidad de agua en cuestión fue "menor", al menos en comparación con lo ocurrido hace año y medio.
Virts, de 47 años y coronel de la Fuerza Aérea, pasó la mitad de su espacio fuera de la estación lubricando tornillos y otros componentes en el extremo del enorme brazo robótico de la estación. Al terminar la lubricación fue cuando la salida espacial concluyó y el astronauta notó el agua. El Control de la Misión usó una cámara para observar de cerca la burbuja grande que flotaba cerca del ojo izquierdo del astronauta.