Madrid.- La Estación Espacial Internacional (ISS), ayudada por un por un vehículo de transferencia automatizado ATV de la Agencia Espacial Europea (ESA), cambió su órbita 800 metros para evitar la colisión con un fragmento de un viejo satélite ruso.
Se calcula que hay 20.000 fragmentos de distinta procedencia flotando alrededor de la Tierra que representan un riesgo de colisión importante para los astronautas y los satélites. A pesar de que hay numerosas propuestas para eliminarlos, el problema sigue sin solución.
Los ATV son las naves de la ESA que abastecen de suministro a la ISS con regularidad. Una de sus funciones es impulsar al laboratorio espacial para cambiar de órbita, ya que éste no tiene impulsores propios.
El pasado 27 de octubre, la ESA activó un protocolo de emergencia para que la cápsula que estaba sujeta a la estación activara sus impulsores durante cuatro minutos. El objetivo de este inusual impulso era evitar el fragmento de basura espacial amenazante.