Madrid.- El Equipo 6 de los Navy Seals norteamericanos, que logró eliminar a Osama Bin Laden, accedió al refugio pakistaní del terrorista en cuatro helicópteros furtivos desconocidos por ahora, probablemente los UH-60 Black Hawk construidos por Sikorsky, debidamente modificados para que resultaran más silenciosos y menos detectables por los radares.
A esa conclusión han llegado expertos aeronáuticos tras plantearse cómo fue posible el asalto por sorpresa evitando la detección de los radares de Pakistán, máxime cuando el refugio del líder de Al Qaeda se encontraba a escasos metros de la Academia Militar Paquistaní y en una ciudad que es lugar habitual de retiro de altos mandos del Ejército de ese país. No menos extraño resultaba que el propio Bin Laden, sus acompañantes y centinelas no fueran alertados por el ruido nada menos que de cuatro helicópteros.
Estos helicópteros furtivos o “invisibles”’ eran un secreto hasta ahora y resultaron decisivos para la eficacia de la operación militar de los EE UU para la eliminación del líder terrorista. Tenían como objetivo franquear furtivamente la frontera entre Afganistán y Pakistán, evitar ser detectados por las defensas antiaéreas paquistaníes y transportar al comando de 24 soldados de elite de la armada estadounidense denominado “Depredadores nocturnos” hasta el refugio de Bin Laden.
Las primeras pistas y las más importantes provienen, al parecer, de las imágenes de los restos de uno de los helicópteros que resultó dañado durante la operación estrellándose al aterrizar en el recinto y que fue destruido por los militares estadounidenses antes de regresar a su base. Sin embargo, la cola de la aeronave ultrasecreta quedó intacta, proporcionando a los expertos aeronáuticos un gran número de datos, según un informe recogido por la BBC y otras agencias informativas.
Después de un minucioso trabajo de detectives, algunos especialistas han concluido que los helicópteros utilizados por el comando norteamericano fueron los UH-60 Blackhawk construidos por la norteamericana Sikorsky Aircraft, significativamente modificados para evitar su detección. Se trata de un helicóptero utilitario de carga media, bimotor y con rotor de cuatro palas. Según determinados expertos, ha sido ésta la primera vez que helicópteros furtivos se han utilizado en una operación real.
Sin embargo, no serían los primeros de su tipo. La misma constructora aeronáutica estadounidense fabricó un número de prototipos de helicópteros furtivos, conocidos como RAH-66 Comanche, para el ejército de EE UU. El programa tuvo que ser cancelado en 2004, debido al incremento de los costes, antes de que el helicóptero entrara en funcionamiento.
“Para lograr que un helicóptero sea furtivo -o lo más indetectable posible- es necesario deshacerse de ciertas formas y áreas que los radares detectan con facilidad, según declaró Tony Osborne, director adjunto de la revista británica sobre helicópteros “Rotary”, a la BBC. «Hay que cubrir partes clave para que las ondas del radar reboten en diferentes direcciones o se absorban. La caja de engranajes del rotor de cola estaba cubierta. Nunca he visto esto antes en un helicóptero. Sabemos que están experimentando todo el tiempo, pero es impresionante verlo puesto en acción. La aleta de la cola es completamente lisa y parece recubierta de un material nacarado que se ve plateado bajo algunas luces y negro bajo otras”, añadió.
«Sólo he visto eso en aviones furtivos y es probable que absorban las ondas de radar. Hasta los remaches están cubiertos. Los radares son muy sensibles e incluso pequeños remaches podrían echar a perder la operación. Los restos de la cola indican que el tren de aterrizaje era retráctil, lo que también por lo general puede ser detectado por el radar. Por eso, su retracción puede haber ayudado a evitar la detección. Parece que el rotor de cola tiene cinco o seis paletas. Esto significa que el rotor podría tener una rotación más lenta y, por lo tanto, hacer menos ruido. El ruido es causado por las puntas de las paletas que giran a gran velocidad, golpeando el aire», explica Osborne.
Las autoridades norteamericanas no han revelado la causa de la caída de uno de los helicópteros en la residencia de Bin Laden, pero Daniel Goure, especialista de defensa en el Instituto Lexington, apuntó que un motivo podría hallarse en la aerodinámica inusual resultante de las modificaciones efectuadas en los aparatos. «Tal vez maniobrar el helicóptero, en particular a baja velocidad, y aterrizarlo resultó mucho más difícil que un Black Hawk ordinario», añadió Goure.
La primera aeronave invisible del ejército estadounidense, el desaparecido F-117, era notoriamente difícil de maniobrar en vuelo, afirmaron las autoridades. Los pilotos del equipo de Navy Seals también reconocen públicamente que han utilizado otras versiones del Black Hawk equipado especialmente con sistemas avanzados de navegación, así como con instrumentos para vuelos a bajo nivel y en cualquier condición climática, durante el día o la noche. Esos aparatos están modificados para que los ocupantes puedan hacer «descensos rápidos a rapel» desde la nave inmóvil en el aire, una técnica que fue utilizada en la operación contra Bin Laden.