Sidney.- Una semana después del primer incidente de un A380, la compañía aérea Singapore Airlines cambiará los motores de tres de sus aviones de ese modelo en los que se han encontrado manchas de aceite, según anunció ayer la compañía aérea que hizo hincapié en que se trata de un movimiento preventivo, tras la ruptura de un motor del avión de la compañía australiana Qantas.
«Basándose en nuevos hallazgos de los análisis de inspección a medida que avanza la investigación del incidente de la semana pasada, vamos a llevar a cabo por precaución los cambios de motor», declaró una portavoz de la aerolínea, según recogió el ‘Sydney Morning Herald’ en su edición de ayer. Dicha portavoz insistió en que el problema detectado por Singapur Airlines «es diferente de lo que había encontrado Qantas».
La compañía australiana también ha detectado fugas de aceite en tres motores de sus A380. Estas dos compañías junto a la alemana Lufthansa equipan este modelo con motores Rolls-Royce, mientras que Emirates y Air France usan otros motores. Cuando Qantas dio cuenta el pasado lunes de esas “anomalías”, Singapore Airlines había asegurado que no había detectado «ningún elemento preocupante» en la revisión de los motores de sus once A-380.
Los aviones movilizados se encuentran en Londres, Melbourne y Sydney y los pasajeros han sido desviados a otros vuelos. Los motores serán sustituidos por otros del mismo modelo, según hizo saber la compañía. La aerolínea ha destacado la recomendación del fabricante Rolls Royce de someter a los motores a una inspección detallada. Hace apenas dos días la compañía había asegurado que en las pruebas técnicas no se había hecho «ningún hallazgo de preocupación.
Los seis A380 de Qantas van a continuar en tierra al menos dos días más. Uno de estos aviones fue el que la semana pasada tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Singapur, adonde llegó con uno de sus reactores incendiados. Tanto Singapore Airlines como la alemana Lufthansa mantuvieron en vuelo su flota del ‘superjumbo’ después de este accidente. Los técnicos de Qantas han señalado que sus Trent 900 estaban funcionando a un ritmo «ligeramente superior» a los de las otras dos aerolíneas.