Varsovia.- Los pilotos del avión que trasladaba al presidente de Polonia, Lech Kaczynski, conocieron que la colisión era inminente, según se desprende del análisis de las grabaciones de la caja negra. La aeronave se estrelló el sábado pasado, cuando intentaba aterrizar en el aeropuerto de la ciudad rusa de Smolensk en medio de una densa niebla.
Los expertos han tratado de entender las conversaciones mantenidas en la última media hora. “Los segundos antes del accidente fueron dramáticos», reveló el fiscal general de Polonia, Andrzej Semeret. La tripulación era consciente de que iba a estrellarse hasta cinco segundos antes de la fatalidad, lo que habría generado un estado de shock en la cabina.
El funcionario indica que las grabaciones se harán públicas dentro de poco, excepto el contenido íntimo, que no se dará a conocer por respeto a las familias. Mientras tanto, continúa en Polonia el debate acerca de si Kaczynski ordenó aterrizar al piloto, pese a las malas condiciones meteorológicas. Aunque hasta el momento no hay pruebas que demuestren esa hipótesis, sí se sabe que la tripulación fue presionada a descender en Smolensk ya que si lo hacían en Moscú o en Minsk (en Bielorrusia), como ordenaban los controladores aéreos, la delegación presidencial no llegaría a tiempo a la ceremonia a la que estaba invitada, en Katyn.
La misma presión se supone que sintió el personal del aeropuerto de Smolensk que, en vez de impedir el aterrizaje, se limitó a recomendar a la tripulación que no descendiera. De haberse tratado de otro avión, se habría cerrado el aeródromo militar, pero era la nave presidencial polaca, las instalaciones se mantuvieron operativas. Los controladores de Smolensk instaron al piloto a desviarse por la escasa visibilidad, pero este ignoró la recomendación y realizó cuatro intentos de aterrizaje antes de chocar contra las copas de tres árboles y estrellarse.