París.- El lanzador Vega está demostrando su fiabilidad. Sobre la base de esa herencia, la ESA y la industria europea están creando nuevos elementos que aumentarán su rendimiento, las capacidades y la flexibilidad del lanzador a partir de mediados de 2019, fecha para la que se planea una prueba de vuelo del Small Spacecraft Mission Service, según anuncia la agencia espacial.
Vega ofrece más oportunidades de lanzamiento de viajes compartidos de bajo coste en órbita terrestre baja para satélites pequeños de menos de 500 kg, desde CubeSats hasta microsats y minisats, desde demostradores de tecnología hasta mega-constelaciones.
Este servicio se basa en una gama de dispensadores especialmente desarrollados que permitirán al operador de lanzamientos Arianespace optimizar las capacidades de lanzamiento de Vega desde el puerto espacial europeo en Kourou, Guayana Francesa.
Se espera que esto reporte importantes beneficios socioeconómicos para Europa, particularmente en el negocio de aplicaciones de satélites ligeros.
Después de esto, un Vega consolidado, Vega-C, realizará su primer vuelo a finales de 2019 para transportar cargas útiles más grandes y pesadas de hasta 2.300 kg., señala la ESA.
El nuevo Vega contará con nuevos motores de primera y segunda etapa más potentes, el P120C y el Zefiro-40 respectivamente, lo que proporcionará el empuje en el despegue. Ambos motores fueron probados con éxito este verano.
La cuarta etapa mejorada de combustible líquido del Vega-C con aviónica mejorada, mayor capacidad y capacidad de reinicio del motor principal dará más flexibilidad para las misiones de carga múltiple.
Este “Attitude Vernier Upper Module +”, (AVUM +), se probó recientemente en el Centro Técnico de la ESA en los Países Bajos para demostrar que puede soportar las fuerzas de lanzamiento.
Se ha desarrollado un carenado más grande y ligero con nuevos materiales y técnicas de fabricación.
El vehículo de reingreso Space Rider de la ESA se lanzará en el Vega-C. Proporcionará una plataforma en órbita para cargas útiles de hasta 800 kg.
Su módulo de servicio orbital, una versión modificada del Vega-C AVUM +, extiende el tiempo que se puede pasar en órbita al menos dos meses antes de que Space Rider regrese con su carga a la Tierra para aterrizar en tierra. El vuelo inaugural está previsto para 2021.
Venus, una etapa superior de empuje eléctrico de Vega, transferirá satélites de una tonelada a órbitas más altas y se utilizará en Vega-C para extender su alcance de mercado a misiones científicas más complejas y para servicios de reemplazo de constelaciones.
Comparte el desarrollo con el módulo de servicio orbital de Space Rider, minimizando así los costes recurrentes y logrando nuevas aplicaciones.
Una evolución de Vega, Vega-E, con una familia de configuraciones basadas en bloques de construcción comunes, aumentará aún más la competitividad más allá de 2025.
Pruebas recientes han incluido el encendido en caliente de la cámara de empuje de subescala del motor M10 de etapa superior. Las pruebas de la cámara de empuje a gran escala están previstas para el próximo año.
Los detalles de los desarrollos de Vega se presentaron en el 69 Congreso Internacional de Astronáutica, celebrado del 1 al 5 del pasado mes de octubre, en Bremen.
Estos desarrollos de Vega son el resultado de la visión establecida en la reunión del Consejo de la ESA a nivel ministerial en 2014. En noviembre de 2019, el Consejo Ministerial se reunirá de nuevo bajo presidencia española, para discutir Space19 + para dirigir las ambiciones de la "próxima generación" de Europa en el espacio y abordar los desafíos. Enfrentando no solo al sector espacial europeo sino también a la sociedad europea en