México.-La Comisión de Investigación de Accidentes Aéreos de México descartan el fallo humano y el mecánico y atribuyen al mal tiempo el accidente del avión Embraer 190 operado por Aeromexico Connetct, que se estrelló poco después de despegar con 99 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo en el estado de Durango el pasado 31 de julio, sin que se produjeran víctimas mortales.
Un cambio súbito en la dirección e intensidad del viento es hasta ahora la causa más probable del accidente del vuelo AM 2431, informan las autoridades de aeronáutica civil mexicana.
El informe preliminar de la Comisión Investigadora de Accidentes de la Dirección General de Aeronáutica Civil indica que se pidió la colaboración a los servicios meteorológicos, concretamente a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y tras observar los videos del clima de ese día, se encontró la microrráfaga de viento que habría derribado el avión de Aeroméxico.
"No hay evidencia de que los motores tuvieran un problema mecánico o técnico", dijo en una conferencia de prensa José Armando Constantino, director de análisis de accidentes e incidentes de la agencia de Aviación Civil de México. “Tampoco hay evidencia de error humano o de fallos mecánicos”, añadió. "Hubo muchas fluctuaciones, hubo un factor externo. El factor externo es una microrráfaga; la causa más probable del accidente fueron factores meteorológicos", concluyó.
La Comisión presentará su informe final detallando sus hallazgos sobre el accidente.