Madrid.– El sindicato Alternativa Sindical, que representa al 20% de los vigilantes de seguridad del aeropuerto Madrid-Barajas, y la empresa Ilunion, de la ONCE, no llegaron a ningún acuerdo el pasado viernes en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), manteniéndose la convocatoria de huelga del 24 de agosto y el 3 de septiembre.
La huelga podría afectar a más de 800.000 pasajeros y en fechas de mayor densidad de vuelos con ocasión del fin y comienzo de vacaciones veraniegas podría reeditar en el aeropuerto madrileño la caótica situación del pasado año en El Prat barcelonés con los paros de los vigilantes de seguridad. Las compañías aéreas, a través de su asociación Aceta, ya han anunciado que esta huelga podría traducirse en numerosas pérdidas de vuelos y conexiones.
Los vigilantes piden a su empresa el cumplimiento con los pluses como los de radioscopía, rotación o productividad acordados con la patronal y Fomento el pasado año pasado.
Alternativa Sindical no descarta que la convocatoria de huelga en Barajas se amplíe en el tiempo en el aeropuerto madrileño e incluso se extienda a otros en los que se producen las mismas situaciones con otras empresas.