Vandenberg.- La nave espacial InSight de la Nasa ha iniciado su viaje de seis meses hacia Marte desde el Complejo-3 de Lanzamiento Espacial en la Base Aérea Vandenberg en California, a bordo de un cohete Atlas V de United Launch Alliance (ULA), llevando todo un complejo equipo de Exploración Interior, Investigaciones Sísmicas, Geodésicas y de Transporte de Calor.
A bordo del mismo cohete viaja un experimento de tecnología de la Nasa separado conocido como Mars Cube One (MarCO). MarCO consiste en dos mini naves espaciales y será la primera prueba de la tecnología CubeSat en el espacio profundo. Están diseñados para probar nuevas capacidades de comunicación y navegación para futuras misiones y pueden ayudar a las comunicaciones de InSight.
La misión InSight, un módulo de aterrizaje estacionario, será la primera misión dedicada a explorar el profundo interior de Marte. También será la primera misión de la Naasa desde los aterrizajes lunares del Apolo en colocar un sismómetro, un dispositivo que mide los terremotos, en el suelo de otro planeta.
"De alguna manera, InSight es como una máquina del tiempo científica que traerá información sobre las primeras etapas de la formación de Marte hace 4.500 millones de años", dijo Bruce Banerdt del JPL, investigador principal de InSight. "Nos ayudará a comprender cómo se forman los cuerpos rocosos, incluida la Tierra, su luna e incluso planetas en otros sistemas solares".
InSight lleva consigo un conjunto de instrumentos sensibles para recopilar datos y, a diferencia de una misión móvil, estos instrumentos requieren un módulo de aterrizaje fijo desde el que puedan colocarse con cuidado sobre y debajo de la superficie marciana.
En cierto sentido, Marte es el exoplaneta de al lado, un ejemplo cercano de cómo el gas, el polvo y el calor se combinan y se organizan en un planeta. Mirar hacia el interior de Marte permitirá que los científicos comprendan cuán diferentes son la corteza, el manto y el núcleo de la Tierra.
La Nasa no es la única agencia entusiasmada con la misión. Varios socios europeos aportaron instrumentos o componentes de instrumentos a la misión InSight. El Centro Nacional de Estudios Espaciales de Francia dirigió un equipo multinacional que construyó un sismómetro ultrasensible para detectar movimientos sísmicos en Marte. El Centro Aeroespacial Alemán (DLR) desarrolló una sonda térmica que puede enterrarse hasta 5 metros bajo tierra y medir el calor que fluye desde el interior del planeta.
La contribución española a esta misión es el instrumento TWINS, diseñado por el Centro de Astrobiología (CAB), el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el INTA y CRISA (Airbus Defence and Space), que monitorizará, a través de sus sensores de temperatura y viento, las condiciones ambientales en la zona de aterrizaje de manera continua durante los 2 años que está previsto que dure la misión.
"InSight es una misión espacial verdaderamente internacional", dijo Tom Hoffman, gerente de proyectos de JPL. "Nuestros socios han entregado instrumentos increíblemente capaces que permitirán reunir ciencia única después de aterrizar".