Washington.- El Telescopio Espacial Hubble de la Nasa, que ha descubierto la estrella azul llamada Icarus, que es la estrella individual más lejana jamás vista, ha medido también con precisión por primera vez la distancia a uno de los objetos más antiguos del universo, un grupo de estrellas nacidas poco después del Big Bang.
Este nuevo criterio de distancia refinado proporciona una estimación independiente para la edad del universo. La nueva medición también ayudará a los astrónomos a mejorar los modelos de evolución estelar. Los cúmulos de estrellas son el ingrediente clave en los modelos estelares porque las estrellas en cada agrupación están a la misma distancia, tienen la misma edad y tienen la misma composición química. Por lo tanto, constituyen una única población estelar para estudiar.
Este conjunto estelar, un cúmulo de estrellas globulares llamado NGC 6397, es uno de los cúmulos más cercanos a la Tierra. La nueva medición establece la distancia del cúmulo a 7.800 años luz de distancia, con solo un margen de error del 3%.
Hasta ahora, los astrónomos han estimado las distancias a los cúmulos globulares de nuestra galaxia comparando las luminosidades y los colores de las estrellas con los modelos teóricos, y con las luminosidades y colores de estrellas similares en el vecindario solar. Pero la precisión de estas estimaciones varía, con incertidumbres que oscilan entre el 10 y el 20 por ciento.
Sin embargo, la nueva medición utiliza trigonometría directa, el mismo método utilizado por los topógrafos, y tan antiguo como la ciencia griega clásica. Utilizando una nueva técnica de observación para medir ángulos extraordinariamente pequeños en el cielo, los astrónomos lograron estirar la vara de medir del Hubble fuera del disco de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
El equipo de investigación calculó la edad de NGC 6397 en 13.400 millones de años. "Los cúmulos globulares son tan viejos que si sus edades y distancias deducidas de los modelos desaparecen un poco, parecen ser más antiguos que la edad del universo", dijo Tom Brown, del Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial (STScI), líder del estudio del Hubble.
Las distancias exactas a los cúmulos globulares se utilizan como referencias en los modelos estelares para estudiar las características de las poblaciones estelares jóvenes y viejas. "Cualquier modelo que esté de acuerdo con las mediciones le da más fe en la aplicación de ese modelo a estrellas más distantes", dijo Brown. "Los cúmulos estelares cercanos sirven como anclajes para los modelos estelares. Hasta ahora, solo teníamos distancias precisas a los cúmulos abiertos mucho más jóvenes dentro de nuestra galaxia porque están más cerca de la Tierra".
Por otra parte, gracias a Hubble, los científicos han descubierto recientemente una enorme estrella azul llamada Icarus, que es la estrella individual más lejana jamás vista. Normalmente, sería demasiado débil para ver, incluso con los telescopios más grandes del mundo. Pero a través de un capricho de la naturaleza que amplifica tremendamente el débil brillo de la estrella, los astrónomos que utilizaron el Telescopio Espacial de la Nasa pudieron localizar esta estrella lejana y establecer un nuevo récord de distancia.
También usaron Icarus para probar una teoría de la materia oscura y para sondear la composición de un cúmulo de galaxias en primer plano. La estrella, alojada en una galaxia espiral muy distante, está tan lejos que su luz tardó 9.000 millones de años en llegar a la Tierra. Esto significa que existió cuando el universo tenía aproximadamente el 30 por ciento de su edad actual.
El descubrimiento de Icarus a través de lentes gravitacionales ha iniciado una nueva forma para que los astrónomos estudien estrellas individuales en galaxias distantes. Estas observaciones proporcionan una mirada rara y detallada de cómo evolucionan las estrellas, especialmente las estrellas más luminosas.
La peculiaridad cósmica que hace visible a esta estrella es un fenómeno llamado "lente gravitacional". La gravedad de un primer plano, un cúmulo masivo de galaxias actúa como una lente natural en el espacio, doblando y amplificando la luz. A veces, la luz de un solo objeto de fondo aparece como imágenes múltiples. La luz se puede magnificar mucho, lo que hace que los objetos extremadamente tenues y distantes sean lo suficientemente brillantes como para ver.