Baikonur.- La nave espacial Soyuz MS-08 despegó este miércoles del cosmódromo de Baikonur, en Kazajstán, hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) con los astronautas de la NASA Drew Feustel y Ricky Arnold, y Oleg Artemyev de la agencia espacial rusa Roscosmos,Está previsto que la nave llegue a la ISS este viernes.
El cosmonauta ruso Artemyev lleva consigo a la ISS el balón de la Copa Mundial de Rusia 2018 que será traída de regreso a la Tierra y es posible que sea utilizada en el primer partido del torneo el próximo mes de junio.
La llegada de Feustel, Arnold y Artemyev restablecerá la tripulación de seis miembros en la estación. Se unirán a Scott Tingle, de la Nasa; el comandante de la Expedición 55, Anton Shkaplerov, de Roscosmos, y Norishige Kanai, de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón. Los miembros de la tripulación pasarán más de cinco meses realizando aproximadamente 250 investigaciones científicas en campos como biología, ciencias de la tierra, investigación humana, ciencias físicas y desarrollo tecnológico.
Está previsto que Shkaplerov, Tingle y Kanai permanezcan a bordo de la estación hasta junio de 2018, mientras que Feustel, Arnold y Artemyev están programados para regresar a la Tierra en agosto.
Los puntos destacados de las próximas investigaciones incluyen: una nueva instalación para analizar materiales, revestimientos y componentes de otros experimentos de gran envergadura en el entorno espacial; un estudio sobre los efectos de la microgravedad en la médula ósea y las células sanguíneas producidas en la médula ósea; y un sistema de administración pasiva de nutrientes recientemente desarrollado para la planta de crecimiento vegetal de Veggie.
Arnold, un ex educador, continuará el Año de la Educación de la Nasa en la ISS, una iniciativa para involucrar a estudiantes y educadores en carreras de vuelos espaciales tripulados y ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM).
Durante más de 17 años, seres humanos han vivido y trabajado continuamente a bordo de la estación, avanzando en el conocimiento científico y demostrando nuevas tecnologías, realizando descubrimientos científicos imposibles en la Tierra que permitan la exploración humana y robótica de larga duración en el espacio profundo. Más de 200 personas de 18 países han visitado el laboratorio único de microgravedad que ha albergado más de 2.100 investigaciones de científicos de más de 95 países.