Madrid.- La Universidad Politécnica de Madrid (UPM) se considera un año más como la primera universidad española en el área de Ingeniería y Tecnología Aeronáutica, según el ránking internacional QS de 2018 por ramas de conocimiento y materias. Asciende del puesto 81 al 76, consolidándose como la primera universidad española en esta área.
De las más de 4.000 universidades analizadas en todo el mundo, España coloca cuatro entre las 150 mejores a nivel internacional en el ámbito de Ingeniería y Tecnología. La oferta formativa del conjunto de las Universidades españolas para los jóvenes atraídos por las carreras técnicas es una de las más competitivas del mundo.
Atendiendo a la clasificación por materias, la UPM continúa como la mejor valorada de las universidades españolas a la hora de estudiar Ingeniería Mecánica, Aeronáutica y de Fabricación (Engineering–Mechanical, Aeronautical & Manufacturing), situando estos estudios entre los 100 mejores del mundo. Los estudios de las ramas aeronáutica y espacial se imparten en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio y el Grado en Ingeniería Aeroespacial es el más demandado dentro de la oferta de titulaciones de grado de la UPM.
Sus más de 3.500 estudiantes matriculados; los 250 profesores que conforman la plantilla docente e investigadora y que participan tanto en proyectos punteros de investigación como en proyectos de innovación educativa; los numerosos convenios de movilidad con universidades extranjeras de primer nivel y los acuerdos marco con empresas e instituciones del sector para la realización de prácticas, posicionan a la ETSIAE como un centro de referencia nacional e internacional en el ámbito de la docencia, la investigación, la innovación y el desarrollo tecnológico en el área de la ingeniería aeroespacial.
El ránking QS, que analiza más de 4.000 instituciones del mundo, tiene como objetivo servir de guía a los estudiantes a nivel global a la hora de elegir un centro en el que continuar su formación. La reputación académica del centro, la opinión de los empleadores, los artículos citados, así como el denominado “índice H”, que mide la calidad de la producción científica de los investigadores en función de la cantidad de citas que han recibido sus publicaciones, son algunos de los aspectos evaluados por QS a la hora de elaborar esta clasificación.