Miami.- El astronauta español de la ESA, Pedro Duque, junto a su colega de la Nasa, Kjell Lindgren, dos científicos y dos asistentes técnicos permanecen desde el domingo y durante diez días trabajando sumergidos a 20 metros bajo la superficie del mar en la base Aquarius, junto a las costas de Florida probando y preparando una expedición espacial.
El año pasado, el astronauta español participó en un curso de formación en cuevas de la ESA.
Ahora forma parte del equipo de la 22 Misión de Operaciones en Ambientes Extremos de la Nasa (NEEMO 22). El hábitat subacuático de NEEMO funciona como base espacial en la que los astronautas realizarán paseos regulares con todo el equipamiento de buceo: al ajustar su flotabilidad, los ‘acuanautas’ pueden simular la gravedad de la Luna, Marte y distintos asteroides.
El astronauta de la NASA Kjell Lindgren es el comandante de esta misión, centrada en los paseos espaciales de exploración y en la Estación Espacial Internacional (ISS). Los objetivos de este año incluyen probar tecnologías para hacer seguimiento de equipamientos y estudios de la composición del cuerpo y del sueño.
El equipo también evaluará el nuevo aparataje de la ESA para ayudar a la evacuación de astronautas durante paseos espaciales. El concepto del Conjunto de Sistemas de Evacuación Lunar (LESA) fue desarrollado y probado en el centro de astronautas que la ESA tiene en Colonia, Alemania.
Durante sus salidas al espacio, por motivos de seguridad, los astronautas siempre van en parejas. En caso de necesidad, LESA permitirá a un astronauta transportar a su colega y rescatarlo llevándolo hasta la base. El sistema fue probado en la instalación de flotabilidad neutra de la ESA y ahora se someterá a un ensayo operacional durante NEEMO.
Un equipo de buceadores dará apoyo a la misión sobre el agua, a modo de control de la misión, y bajo el agua, como buceadores de soporte. Al astronauta de la ESA Andreas Mogensen, acuanauta veterano, se unirán el formador de astronautas de la ESA Hervé Sevenin y el eurocom de la ESA, Andrea Boyd, para complementar al equipo de la Nasa.
Las agencias espaciales siempre buscan formas de prepararse y entrenarse para los vuelos espaciales sin salir de la Tierra. La ESA envía a sus astronautas bajo tierra en las cuevas de Sicilia, mientras que la Nasa se entrena bajo el agua. Los astronautas de todos los socios de la Estación Internacional se unen en esta experiencia para que resulte lo más realista posible, ya que trabajar de forma eficiente y segura con equipos culturalmente diversos es parte de la misión.