Cabo Cañaveral.- La Nasa ha lanzado con éxito este mediodía desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida, el cohete Delta IV con la nave Orion en su primer vuelo no tripulado de prueba y con la que espera en el futuro enviar astronautas al espacio más lejano. Cuatro minutos después, se separaba la primera fase del cohete y se activaban los propulsores de la segunda fase, que llevaron a Orion a la órbita terrestre.
Inicialmente, el despegue estaba programado para hace 24 horas, pero unas fuertes ráfagas de viento e inconvenientes técnicos originados en una válvula de combustible, obligaron a reiniciar la cuenta atrás por dos veces y finalmente aplazarlo hasta hoy.
Orión recorrerá 5.800 kilómetros más allá de la superficie de la Tierra, una distancia quince veces superior a la que se encuentra la Estación Espacial Internacional (ISS). Durante las dos órbitas previstas a nuestro planeta en un viaje de cuatro horas de duración, los ingenieros evaluarán los sistemas críticos para la seguridad de la tripulación, el sistema de interrupción de lanzamiento, el escudo de calor y el sistema de paracaídas.
Los datos recogidos durante la misión influirán en las decisiones de diseño y validación de los modelos informáticos existentes. El vuelo también reducirá los riesgos y los costos de la misión en general para futuros vuelos de Orión.
La nave regresará a la atmósfera terrestre a velocidades cercanas a los 30.000 kilómetros por hora, generando temperaturas de hasta 2.200ºC, antes de amerizar en el Océano Pacífico, en la costa de Baja California.
Orion, construida por la compañía Lockheed Martin, está diseñada para llevar a los seres humanos más lejos que nunca. La nave espacial será el vehículo de exploración que llevará a los astronautas al espacio y proporcionará un seguro regreso de las misiones en el espacio.
La nave fue diseñada originalmente dentro del programa "Constellation", con el que la Nasa esperaba poner nuevamente al hombre en la Luna en 2020, pero el presidente Barack Obama canceló el proyecto en 2010 por su elevado coste.
"Orion es la nave de exploración de la Nasa y está vinculada con el sistema de lanzamiento espacial, o SLS, cohete que nos permitirá explorar el sistema solar", dijo Mark Geyer, director del programa de Orion, en el Centro Espacial Johnson en Houston.
La cápsula tiene capacidad para transportar a cuatro astronautas, uno más que las naves del programa Apolo. Con Orion la Nasa contará de nuevo con vehículo propio para enviar al espacio a sus astronautas, ya que, desde que retiró en 2011 su flota de transbordadores, depende de las naves rusas Soyuz para hacer los relevos en la ISS.
La Nasa está desarrollando las capacidades necesarias para enviar astronautas a un asteroide en 2025 y a Marte en la década de 2030. Este vuelo de prueba de Orión servirá para poder seguir desarrollando la tecnología necesaria para estos grandes retos. Marte es un destino rico para el descubrimiento científico y la exploración robótica y humana a medida que ampliamos nuestra presencia en el sistema solar. Su formación y evolución son comparables a la Tierra, lo que ayuda a aprender más sobre la historia y el futuro de nuestro propio planeta. Marte tenía condiciones adecuadas para la vida en su pasado. La exploración futura podría descubrir pruebas de vida, respondiendo a uno de los misterios fundamentales del cosmos.
Mientras los exploradores robóticos han estudiado Marte durante más de 40 años, el camino de la Nasa para la exploración humana de Marte comienza en la baja órbita terrestre a bordo de la ISS. Los astronautas en el laboratorio orbital están ayudando a probar muchas de las tecnologías y sistemas de comunicación necesarios para las misiones humanas al espacio profundo, incluyendo Marte. La estación espacial también avanza nuestra comprensión de cómo el cuerpo cambia en el espacio y la forma de proteger la salud de los astronautas.
El próximo paso es el espacio profundo, donde la Nasa enviará una misión robótica para capturar y redirigir un asteroide en órbita alrededor de la Luna. Los astronautas a bordo de la nave espacial Orion explorarán el asteroide en la década de 2020, y regresarán a la Tierra con muestras. Esta experiencia en vuelos espaciales tripulados más allá de la baja órbita de la Tierra ayudará a la Nasa a probar nuevos sistemas y capacidades, como el sistema de Propulsión Eléctrica, el cual será necesario para enviar carga como parte de las misiones humanas a Marte.
Pero para poder alcanzar estos grandes retos, quedan por delante unos años de trabajo en los cuales serán decisivos los datos que se recogerán durante el primer vuelo de prueba de Orión, el cual mostrará el camino a seguir para poder avanzar en futuros vuelos de prueba.