Tel Aviv.- El satélite de comunicaciones Amos 7, de la compañía israelí Spacecom Comunication, ha entrado en servicio, un hecho importante después de perder dos satélites en los últimos dos años. Amos-7 reemplazará a Amos-2 y prestará servicio a clientes en Europa, áfrica y Oriente Medio.
Esta fue una de las tareas que tenía programadas el satélite Amos-6 que fue destruido el pasado mes de septiembre en Florida cuando estalló un lanzador de SpaceX. Spacecom había perdido contacto con otro de sus satélites en 2015.
Amos-7 es la primera incorporación a la flota de Spacecom desde la explosión de Florida. Está en órbita desde 2014 y se obtuvo en un acuerdo con Asia Satellite Telecommunications Holdings a un coste de 22 millones de dólares al año durante cuatro años, con una opción para prorrogarse un año más.
"El satélite es un elemento clave para expandir nuestros patrones de crecimiento multirregionales y mejorar la variedad de comunicaciones, emisión, banda ancha y datos que podemos proporcionar", dijo el vicepresidente senior de ventas Jacob Keret.
Spacecom también anunció que estaba comprando un satélite de Boeing Satellite Systems International por 161 millones de dólares.