Viena.- El Gobierno austríaco ha demandado este jueves a Airbus por unos daños estimados en 1.100 millones de euros ocasionados en la venta de 15 aviones Eurofighter en 2003 con supuestos fraude y corrupción, informó el Ministerio de Defensa de este país. Airbus rechaza las acusaciones, según la agencia austríaca APA.
El ministro de Defensa, Hans Peter Dozkozil, dijo en conferencia de prensa que Austria fue engañada respecto a los precios de venta reales y sobre la capacidad del consorcio aeronáutico europeo de entregar y equipar los aviones.
Según el ministro austríaco existe una clara evidencia de que Airbus engañó a conciencia a la República de Austria. El Eurofighter ha sido desarrollado y construido conjuntamente por Alemania, Reino Unido, España e Italia y estaba destinado a convertirse en la columna vertebral de la fuerza aérea europea en las próximas décadas.
Al cerrarse el acuerdo en 2003, Austria aceptó un precio de unos 2.000 millones de euros por la compra de 18 aviones. En 2007 las partes acordaron reducir el número de aviones a 15 y bajar el precio en 250 millones de euros. En el marco del acuerdo, el consorcio que construye los Eurofighter prometió a compañías austríacas contratos por valor de 4.000 millones de euros.
Insistió el ministro acerca de que las operaciones de comercio compensatorio constituyen lanzadera ideal para la corrupción, la mala gestión y el lavado de dinero. Austria, subrayó Doskozil, no aceptará que los contribuyentes también participen en la financiación de sobornos.
Los investigadores sostienen que Airbus incluyó en secreto en el precio de venta una cantidad de 183 millones de euros que supuestamente formaba parte de las operaciones de comercio compensatorio. De acuerdo con Viena, una parte de esa suma fue desviada más tarde hacia canales criminales.
Además de los 183 millones de euros, los costos de mantenimiento de los aviones resultaron ser mucho más altos de lo previsto en el acuerdo, lo que ocasionó daños económicos estimados en más de mil millones de euros, según el gobierno.
El ministro austríaco sostiene que sin las condiciones engañosas ofrecidas por Airbus, podrían haberse inclinado por otra opción a la hora de sustituir su flota como el JAS 39 Gripen del sueco Saab y dejó entrever que estudia la posibilidad de devolver los aviones comprados.