Pekín.- El Parlamento de Pekín aprobó el pasado viernes un plan gubernamental para la emisión adicional de bonos por valor de unos 1.000 millones de dólares destinados a financiar la construcción de un nuevo aeropuerto en la ciudad, según informó la agencia oficial china Xinhua.
Una parte de ese dinero se empleará para expropiar terrenos y demoler viviendas en las zonas que ocupará el nuevo aeropuerto, según afirma Li Yingjin, jefe del departamento municipal de Hacienda, en un informe entregado a los legisladores municipales en el que se presentan los reajustes al presupuesto de 2015.
Li atribuye el incremento presupuestario a la ampliación de las zonas a demoler, entre otras causas.
La construcción del nuevo aeropuerto, situado en el distrito de Daxing, al sur de Beijing, se inició en diciembre de 2014 y tardará más o menos cinco años en concluirse.
El aeropuerto, diseñado para atender anualmente a más de 72 millones de pasajeros, dos millones de toneladas de carga y correo y 620.000 vuelos para 2025, ayudará a satisfacer la demanda creciente de transporte aéreo y a equilibrar los niveles de desarrollo de las zonas sur y norte de Pekín.